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Los médicos descartan reimplantar los dos dedos al niño de Lepe herido por un petardo

El suceso ocurrió cuando el pequeño cogió del suelo un elemento pirotécnico que no había explotado

Los médicos del hospital Virgen del Rocío de Sevilla han descartado que se puedan reimplantar los dedos al niño de 5 años que el pasado martes perdió el pulgar y el índice, así como la primera falange del anular y el corazón de la mano derecha, tras estallarle un petardo que manipulaba en el recinto romero de Lepe (Huelva).

El niño sufrió el accidente cuando se encontraba en la calle Mirabrás del recinto romero del municipio, a las 16.30 del martes, y recogió del suelo un petardo de gran potencia que no había estallado, pero que explotó justo cuando lo tenía en la mano.

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El menor fue atendido en primera instancia en el servicio de Urgencias del centro de salud de Lepe, después se le envió al hospital Infanta Elena de Huelva, de donde fue enviado al Virgen del Rocío.

El padre del niño, Manuel Domínguez, ha dicho que en el lugar del suceso se recogieron "trozos de dedo y huesos" ante la posibilidad de que se le pudiesen reimplantar al pequeño, una posibilidad que finalmente han descartado los médicos.

Sobre el estado del menor, Domínguez ha señalado que se encuentra bien, aunque algo desorientado, y sobre el suceso, ha señalado que "lo único que cuenta es que vio que los dedos salían volando".

"Cogió una bomba"

"Lo que él cogió no era un petardo, era una bomba, y no para un niño, sino para cualquiera", ha lamentado el padre, quien ha indicado que la potencia de la explosión fue tal "que a él le destrozó la mano, pero al primo, que estaba con él, lo despidió por la fuerza con la que explotó".

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