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Diez arrestados en San Sebastián por 'kale borroka'

Dos de los detenidos son Jon Villanueva y Asier Gómez, que presuntamente huyeron de la operación contra violencia callejera desarrollada en Barakaldo

Diez personas que se encontraban en busca y captura por orden de la Audiencia Nacional han sido detenidas esta tarde en San Sebastián acusadas de haber participado en numerosos actos de violencia callejera cometidos en el País Vasco, según ha confirmado el Ministerio del Interior.

Ocho de los arrestados huyeron de la operación desarrollada por la Policía el pasado 18 de abril en las localidades guipuzcoanas de Errenteria, Oiartzun y Arrasate, y otros dos escaparon de la redada efectuada por la Ertzaintza el 6 de mayo en Baracaldo, en Vizcaya, según las mismas fuentes. A todos se les imputan numerosas acciones de terrorismo callejero. El Ministerio del Interior ha recordado que la Audiencia Nacional había emitido órdenes de busca y captura para su arresto.

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Según recoge el diario Gara en su edición digital, los detenidos han ofrecido esta mañana una rueda de prensa en Oiartzun acompañados de sus abogados y familiares y, posteriormente, se han dirigido al Juzgado de Guardia de San Sebastián con la intención de prestar declaración. Finalmente, no han accedido a la sede judicial ya que allí les esperaban los agentes del Cuerpo Nacional de Policía, que les han arrestado.

Los detenidos son Alain Luna, de 22 años, Hodeiertz Urain, también de 22, Oihana Mujika, de 26, Maitane Linazasoro, de 22, Egoitz Urbe, de 28, Oinatz Arbelaitz, de 24, Imanol Sagarzazu, de 23, Iker Zabala, de 23, Asier Gómez de Salazar, de 27, y Jon Villanueva, de 24 años.

Fuentes de la lucha antiterrorista han indicado que estos dos últimos huyeron de la operación desarrollada en Barakaldo el pasado 6 de mayo. En cuanto al resto, la Policía los considera responsables de la organización juvenil radical Segi en la comarca guipuzcoana de Oarsoaldea, concretamente en las localidades de Errenteria, Oiartzun y Lezo, quienes supuestamente participaron en numerosas acciones de violencia callejera y huyeron tras la operación desarrollada por la Policía el pasado 18 de abril.

Tras su traslado a la Audiencia Nacional, el juez Grande Marlaska ordenó el ingreso en prisión de cinco de ellos y dejó en libertad a los otros cinco, a cuatro con fianza y al quinto con la obligación de comparecer ante el juez cada 15 días. A este grupo se le imputó haber cometido desde 2005 una decena de ataques y sabotajes, fundamentalmente en Errenteria, contra objetivos como el Juzgado de Paz de esta localidad, la comisaría de la Ertzaintza o el domicilio particular de un ertzaina.

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