La juez reclama a Interior que facilite todas las comunicaciones del incendio de Horta

Nueva vuelta de tuerca en la embrollada instrucción judicial que investiga el operativo del incendio de Horta de Sant Joan (Terra Alta) del pasado julio en el que fallecieron cinco bomberos de élite de la Generalitat. La juez de Gandesa que lleva el caso ha requerido al departamento de Interior que le remita la copia de seguridad de todas las comunicaciones que el cuerpo de Bomberos realizó durante la extinción del incendio. La medida judicial se produce después de que Interior ya entregara, supuestamente, toda la documentación sobre el asunto y entre las acusaciones del abogado de una de las familias de los fallecidos, Pau Simarro, de que la Generalitat ha ocultado información. Interior dispone de diez días para entregar a la juez la documentación requerida.

El Juzgado responde así a la petición de Simarro, que el jueves notificó a la magistrada que algunas conversaciones relativas al incendio habían sido borradas. La juez aprecia esas dudas después de tomar declaración a uno de los bomberos que participó en el incendio. "Hay comunicaciones vitales que no han quedado grabadas. Incluso algún técnico ha manifestado que no sabe por qué no se grabaron algunas conversaciones", declaró el pasado día 16 el caporal Luis Alfonsin Otero. La explicación oficial facilitada por la Generalitat, según añadió el propio Otero, arguye que algunas comunicaciones no quedaron registradas por razones técnicas a causa del elevado número de comunicaciones que tuvieron lugar durante el operativo. Entre las conversaciones que se ha comprobado no figuran en la documentación de la Generalitat está la del propio Otero con uno de los vehículos autobomba que abastecía al grupo de bomberos de élite amenazados por el fuego poco antes de la tragedia.

"Tenemos la fundada sospecha de que algunos registros de aquella actuación se han perdido de forma accidental o se han eliminado voluntariamente", señaló la petición de Simarro. La juez ha respuesto a esta posibilidad requiriendo a Interior todos los datos almacenados en el sistema informático del departamento con certificación de exactitud de su contenido. También reclama que se añadan datos sobre la posible sustitución de datos desde que el incendio hasta la fecha y un "informe detallado" de todas las operaciones de mantenimiento y sustitución de los ordenadores.

La declaración de Otero no es la única que menciona la falta de información en la documentación aportada por Interior sobre la gestión del incendio. Carles Pumar, quien ejerció de subinspector en prácticas en la extinción, declaró su sorpresa al comprobar que faltaban transcripciones de los movimientos de los vehículos en el incendio. "No debería ser así", declaró el bombero. En ese caso, la explicación oficial ofrecida por los autores del informe fue que probablemente se solaparon varias comunicaciones.