No al envío de armas a Venezuela
El Gobierno de España figura entre los más críticos con el régimen de Nicolás Maduro y el que ofrece uno de los apoyos más firmes a la oposición. Sin embargo, España figura entre los principales proveedores a Venezuela de equipo militar, así como de vehículos y material antidisturbios para reprimir a los opositores, según indicó el Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación de la Paz. La misma fuente de información añade que las bombas lacrimógenas que poseen los cuerpos de seguridad provienen de la empresa brasileña Condor Non-Lethal Technologies; mientras la empresa española Falken mantuvo un convenio con la Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares (CAVIM) para la fabricación nacional de bombas lacrimógenas.
España debería plantearse un embargo de armamento y de material antidisturbios a Venezuela hasta que en ese país se restaure la democracia y se respeten los derechos humanos. No es concebible desde el punto de vista ético que, con vistas a la opinión pública, España mantenga una postura de condena al régimen de Maduro y por otra se mantenga en la lista como uno de los principales proveedores de material represivo contra los manifestantes en Venezuela.— Alejandro Rodríguez Andara. Vitoria-Gasteiz.
