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VENEZUELA

Chávez pone al Ejército en estado de alerta por la huelga general

El paro nacional contra el presidente Hugo Chávez, prorrogado 24 horas, podría convertirse en indefinido

El Gobierno venezolano ha declarado hoy de el "estado de alerta" militar ante la huelga general de 48 horas que impulsa la alianza del empresariado y los sindicatos, pese a que ha afirmado que la situación es de "absoluta normalidad". El Gobierno, por boca del ministro de Defensa, José Vicente Rangel, ha justificado la medida en que la huelga, más allá de las justificaciones sociales y económicas, forma parte de un plan conspirador para sacar del poder al presidente Hugo Chávez.

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El paro general, que comenzó ayer y fue prorrogado por otras 24 horas, es el segundo que los principales sindicatos -sobre todo la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), la mayor fuerza sindical del país- y fuerzas empresariales emprenden contra el Gobierno "abusivo" de Hugo Chávez. La huelga tiene como marco la pugna que libran desde febrero pasado la élite de gerentes y la nueva directiva de la estatal petrolera, nombrada por Chávez en marzo, que amenaza con provocar una escasez de combustible en el país.

Según el ministro de Defensa, "existe un propósito de llevar al país a una confrontación". Además, ha negado que se haya ordenado el acuartelamiento de la Fuerza Armada Nacional (FAN), pero ha admitido que "hay un estado de alerta, que es normal en situaciones especiales".

Rangel ha señalado que "no hay problemas de orden público", a pesar de que en los estados de Anzoátegui y Zulia, en el este y oeste del país respectivamente, se han suscitado brotes de violencia entre sectores adeptos y contrarios al paro. Además, ha reiterado, como ya hiciera ayer el Gobierno, el "rotundo fracaso" de la huelga de la CTV y la patronal Fedecámaras, que ayer anunciaban el éxito de la convocatoria, cifrando el seguimiento en un 80%.

"Los hechos están demostrando que no existe capacidad para sacar a Chávez del Gobierno, el fracaso del paro demostró que no tienen fuerza", ha dicho Rangel, quien ha llamado al "diálogo" y a "reponer la paz" entre los venezolanos.

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Bombardeo propagandístico

La oposición decidió ayer extender la protesta tras acusar al Gobierno de "agredir" el martes a la prensa con un bombardeo constante de conexiones en cadena obligatorias para todos los medios audiovisuales, lo que radicalizó el conflicto y podría desatar una acción mayor, según Fedecámaras.

"Este paro se extiende 24 horas", dijo el presidente de la CTV, Carlos Ortega, que advirtió que la huelga podría convertirse en "indefinida" sin continúan las "agresiones" por parte del Gobierno de Chávez.

Crisis de la industria petrolera

La industria petrolera, que proporciona casi la mitad de los ingresos del presupuesto nacional y que está inmersa en una crisis interna desde hace seis semanas, funcionó con normalidad según portavoces de su directiva y de sus sindicatos.

Chávez despidió el domingo a buena parte de la alta gerencia de PDVSA (Petróleos de Venezuela SA), en sanción por haberla paralizado parcialmente, a fin de presionar la renuncia de la nueva directiva nombrada por el Gobierno en uso de sus atribuciones legales.

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