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VIOLENCIA EN IRAK

El jefe de Al Qaeda en Irak reivindica los ataques que han dejado hoy 60 muertos

Un terrorista suicida comete una matanza a la entrada de una comisaría en el centro de Bagdad.- Trece iraquíes pierden la vida en una emboscada en Baquba

El grupo que lidera el jordano Abu Musab al Zarqaui, supuesto líder de Al Qaeda en Irak, ha reivindicado en una web islamista los atentados de hoy en Bagdad y Baquba, que han dejado al menos 60 muertos. En la capital iraquí, un suicida ha matado a 47 personas en una comisaría del centro de la ciudad. Más al norte, en Baquba, doce policías y un civil han muerto en una emboscada tendida por los insurgentes.

A finales de julio, un suicida con un coche bomba mató a 70 personas en Baquba. Fue al atentado más sangriento tras el traspaso de soberanía.
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En Bagdad, un coche conducido por un kamikaze ha saltado por los aires a la entrada de un puesto de policía en la céntrica calle Haifa, donde una multitud de iraquíes, en su mayoría jóvenes, esperaban su turno para solicitar trabajo. Esa céntrica y conflictiva calle, en la orilla occidental del río Tigris, fue escenario el pasado domingo de ataques y enfrentamientos entre las tropas de EE UU e insurgentes iraquíes, en los que murieron trece personas, entre ellas un periodista de la televisión Al Arabiya.

En la explosión de esta mañana han muerto al menos 47 personas y más de 140 han resultado heridas, alguna de ellas muy graves. El atentado, el más sangriento ocurrido en Bagdad en los últimos seis meses, ha sacudido el centro de la capital a primera hora, cuando los comercios comenzaban a llenarse de gente, según el Ministerio de Sanidad iraquí.

Un gran cráter podía divisarse en el lugar del atentado, a pesar de que el Ejército norteamericano ha impedido el acceso a los informadores, y sólo podía observarse desde una distancia de unos cien metros. Efectivos de la policía iraquí ayudados por los bomberos intentaban rescatar a varias personas heridas, que habían quedado atrapadas dentro de algunos vehículos alcanzados por la explosión.

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Una multitud de curiosos coreaba junto al cordón de seguridad eslóganes contra EE UU, mientras los propietarios de varias tiendas, destrozadas por el estallido, se afanaban en limpiar sus comercios, en medio de escenas de rabia y dolor. "Yo he contado al menos quince muertos y decenas de heridos. La peor parte se la han llevado los hombres que estaban esperando para entrar en el cuartel y dos coches que pasaban en ese momento por delante de la comisaría", ha relatado un oficial de la policía iraquí cerca del lugar de la explosión.

Al poco de producirse el ataque suicida, un portavoz del ministerio del Interior ha negado que se tratara de un kamikaze: "Según nuestras primeras investigaciones, se trata de un coche bomba. Estaba aparcado justo donde aguardan en fila los nuevos voluntarios que vienen para alistarse, de ahí el gran número de víctimas".

Trece muertos en Baquba

La violencia también ha golpeado de nuevo la ciudad de Baquba, al norte de Bagdad. Allí, doce policías y un civil iraquíes han muerto en un emboscada contra su vehículo perpetrada por un grupo de desconocidos. Los miembros de la nueva policía de Irak son uno de los principales objetivos de los grupos insurgentes, que les acusan de mantener una actitud cómplice con las tropas de ocupación.

En Ramadi (oeste de Irak), se han recrudecido los enfrentamientos entre soldados estadounidenses e insurgentes. Al menos ocho personas han muerto en los choques, según ha informado la radio iraquí. La cadena, que ha citado a su corresponsal en la ciudad, no ha dado más detalles, pero ha señalado que los enfrentamientos continuaban durante esta tarde (hora española). Ramadi, ciudad de población suní, está considerada como uno de los feudos de los grupos rebeldes, junto con Faluya y Baquba.

Un grupo de hombres profiere gritos contra EE UU mientras retira un cadáver del lugar del atentado.
Un grupo de hombres profiere gritos contra EE UU mientras retira un cadáver del lugar del atentado.AP

Nuevos secuestros

La insurgencia combina los atentados con los secuestros de ciudadanos occidentales bajo la amenaza de matarlos si sus Gobiernos no ceden al chantaje y abandonan Irak. Mientras Italia sigue en vilo por la captura, hace una semana, de dos jóvenes italianas de una ONG, hoy, la cadena de televisión Al Yazira ha difundido un nuevo vídeo en el que un grupo armado anuncia el secuestro de un camionero jordano y amenaza con matarlo si la empresa para la que trabaja no cesa sus actividades en Irak en las próximas 48 horas.

Sabotajes a oleoductos

Los ataques a pozos petrolíferos siguen siendo el arma utilizada por la insurgencia para mermar la recuperación de la economía iraquí. Hoy se han producido dos nuevos sabotajes; el primero de ellos ha obligado a interrumpir las exportaciones de crudo a través del terminal turco de Ceyhán, mientras que el segundo redujo el abastecimiento eléctrico de las ciudades de Kirkuk y Baiji.

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