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Ahora, contra el terrorismo de los paramilitares

Polémica en torno a una convocatoria por Internet contra los 'paras'

¿Se repetirá el próximo 6 de marzo lo ocurrido el 4 de febrero, cuando millones de colombianos marcharon en todo el mundo contra la guerrilla de las fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)? Para esa fecha está convocada una marcha en solidaridad con las víctimas del paramilitarismo colombiano y contra la parapolítica ?presuntos nexos entre políticos y paras? y los crímenes de Estado.

La convocatoria ha generado polémicas y falsos dilemas, como ocurrió con la protesta contra la guerrilla más poderosa del país. Mientras unos aseguran que hay que seguir saliendo a la calle para cerrarle el paso a todo tipo de violencia, otros, como el ex ministro del Interior Fernando Londoño, asegura que es un "desagravio" para las FARC y una "afrenta contra el Ejército".

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Iván Cepeda, el abogado organizador de la protesta del 6 de marzo, no se atreve a vaticinar cuánta gente saldrá a la calle ese día. Para él, lo importante no será la cantidad de gente que participe en la protesta, sino su valor simbólico. "Es necesario que el día] 6 se produzca un nuevo momento de ese ascenso ético de nuestra sociedad; un nuevo paso en la condena social contra todos los crímenes, sin rodeos ni justificaciones, incluidos los cometidos por agentes del Estado".

En la céntrica plaza de Bolívar de Bogotá, donde se celebrará la concentración final, se convocará a un diálogo que ponga fin a la larga sangría que asola a Colombia desde hace ya 60 años. "Queremos trascender", asegura Cepeda, un luchador por los derechos humanos de 45 años.

Pero no se engaña: la imagen de Ingrid Betancourt ?la candidata presidencial que la próxima semana cumplirá seis años de secuestro por las FARC? y las pruebas de supervivencia de los otros cautivos considerados canjeables por guerrilleros presos "tuvieron un papel detonante" en la "formidable reacción ciudadana" del 4 de febrero.

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Por el contrario, la mayoría de las víctimas de los paramilitares son invisibles, no tienen rostro. Por eso, la convocatoria del 6 de marzo invita a los participantes a marchar con la foto de uno de los millones de desplazados, o de uno de los miles de desaparecidos o asesinados por esa maquinaria de muerte que muchas veces actuó con el apoyo ?por acción u omisión? del Ejercito, o de una de las víctimas de las ejecuciones extrajudiciales, presentadas como falsos positivos por los miembros de la fuerza pública.

Las fotos serán el símbolo de esta protesta ciudadana, planeada desde noviembre pasado, como preámbulo al Cuarto Encuentro Nacional del Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes del Estado, de la cual Cepeda es portavoz. Su padre, Manuel, dirigente comunista, fue asesinado en 1994 por paramilitares. Dos suboficiales han sido condenados por el crimen.

José Obdulio Gaviria, asesor del presidente colombiano, Álvaro Uribe ?al que la oposición critica su, cuando menos, permisividad con el paramilitarismo?, no sólo anunció que el mandatario no se unirá a los manifestantes el 6 de marzo, sino que invitó a los colombianos a imitar su ejemplo. La convocatoria proviene de las FARC, argumenta.

Esta postura, dice Cepeda, "es un grave error". "No tiene prestación que un Gobierno que ha apoyado casi de manera institucional la marcha contra las FARC [se convocó desde ministerios y Embajadas y se dio permiso a todos los empleados oficiales] sindique a las víctimas del paramilitarismo de ser voceras de la guerrilla?".

La agencia de noticias Anncol, que recoge el pensamiento guerrillero, ha hecho su propia convocatoria a la marcha. "Personas que secuestran no pueden atribuirse entidad moral para rendir homenaje a las víctimas", dijo Cepeda al rechazar el respaldo de las FARC. Pero añade que ahora el temor es que las acusaciones de connivencia con la insurgencia lanzadas por el asesor presidencial los haga vulnerables en un país donde muchos se sienten con la autoridad para disparar contra quien piense distinto.

A la convocatoria, realizada por Internet, se han sumado los grupos universitarios, el Partido Conservador ?de la coalición de Gobierno?, las centrales obreras y organizaciones de derechos humanos; también se espera el apoyo de los liberales y del Polo Democrático, que agrupa a la izquierda democrática colombiana. En 10 países ?entre ellos, España, Francia y Estados Unidos? habrá también marchas por los desaparecidos, los desplazados, los masacrados y ejecutados por los paramilitares en Colombia.

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