_
_
_
_
_

Los ensayos en animales dan siempre mejores resultados

La falta de una regulación sobre la publicidad de los trabajos alienta falsas esperanzas

Los ensayos en ratones son un paso prácticamente obligado de la mayoría de los tratamientos. Pero muchos de los avances que se publican en estos animales nunca llegan al ser humano. Un artículo de PLOS One investiga en concreto lo que ha pasado con los trabajos sobre fármacos para los infartos, y ha descubierto que, aparentemente, las cobayas tienen un 30% de probabilidades más de curarse que las personas.

El trabajo, firmado como primer autor por el neurólogo Malcolm Macleod, de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido) apunta a varias causas, aparte de la validez o no del modelo animal. El primero es que el resultado de un 16% de los ensayos en animales no se publican porque no son positivos. Esto sucedía antes también con los ensayos en personas, pero Estados Unidos estableció una base de datos en la que hay que registrar todas las investigaciones, de manera que se puede saber si el fármaco funcionó en todos los casos o sólo en parte. Esto no existe para las fases previas, cuando se trabaja con animales. "No informar de los resultados negativos en animales es poco ético, porque puede llevar a ensayos prematuros en seres humanos", afirma Macleod en Nature.

En concreto en el campo de los medicamentos para prevenir los coágulos, Macleod y su equipo señalan que ha habido ensayos sobre 500 productos que mostraron cierta eficacia en animales, pero que de ellos sólo os (la aspirina y los plasminógenos) se han demostrado eficaces.

Un científico sostiene en su mano un ratón en el Laboratorio Jackson, en Bar Harbor (EE UU)
Un científico sostiene en su mano un ratón en el Laboratorio Jackson, en Bar Harbor (EE UU)AP

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_