_
_
_
_
_

Greenpeace asegura que Cofrentes ha sufrido 102 sucesos en una década

La central nuclear supera los 500 días de trabajo ininterrumpido, según Iberdrola

Greenpeace y la plataforma Tanquem Cofrents denunciaron ayer que la central nuclear de Cofrentes ha sufrido 102 sucesos de seguridad en la última década y 25 paradas no programadas para realizar reparaciones. Estos incidentes, según el informe elaborado por ambas organizaciones, constituyen una de las razones que justifican el cierre de la planta. Desde 2001 hasta el 10 de marzo de 2011, Cofrentes ha sufrido 102 sucesos de seguridad notificados por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), de los que dos han sido de nivel 1 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares.

De acuerdo con estos datos, Greenpeace y Tanquem Cofrents solicitaron al Gobierno que no renueve el permiso de explotación de la central, que vence el 20 de marzo, puesto que "puede tomar una decisión distinta" al informe del CSN. La central nuclear de Cofrentes "no es necesaria, está envejecida y obstaculiza el desarrollo de las energías renovables", afirmó el responsable de la campaña nuclear de Greenpeace, Carlos Bravo.

El informe apunta que los trabajadores reciben el triple de dosis radiactivas
Más información
El Gobierno dará prioridad a la revisión de seguridad de Cofrentes tras prorrogar su licencia

La planta, además de los sucesos de seguridad, ha declarado desde 2007 seis prealertas de emergencia por motivos técnicos, cinco de ellas en los últimos tres años causadas por el fallo reiterado de las válvulas de alivio y de seguridad del circuito primario. En ese sentido, el informe revela que los trabajadores de la central reciben dosis radiactivas "anormalmente altas" durante los procesos de recarga (paradas programadas) del combustible, que en Cofrentes se prolongan durante un mínimo de dos meses. Los empleados reciben el triple de dosis que en otras centrales nucleares durante esos periodos, por lo que Greenpeace exigió una explicación a Iberdrola, la compañía propietaria de la central, y al CSN.

El informe apunta que otro de los motivos que reflejan el fin de la vida útil de la central es la capacidad de la piscina que acoge los residuos, ya que fue diseñada para albergar "combustible gastado" durante 25 años y Cofrentes está en funcionamiento desde hace 27 años.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

En cuanto a producción eléctrica, Bravo expuso que la contribución de Cofrentes a la producción final en 2010 se situó en el 3,3% y la exportación neta de electricidad de España supuso el 3,11%, por lo que a su juicio no es necesaria para garantizar el suministro eléctrico.

La central, puntualizó ayer Iberdrola, ha superado los 500 días de operación ininterrumpida desde que se acopló a la red eléctrica nacional tras la recarga de combustible llevada a cabo en 2009. A lo largo de este periodo, la planta ha generado casi 12.900 millones de kilovatios hora, con un factor de carga del 98,3%.

La compañía eléctrica incidió en que esta producción ha supuesto un ahorro de unos 19 millones de barriles de petróleo, cuyo coste ronda los 1.400 millones de euros en importaciones de petróleo o gas, y ha evitado la emisión de nueve millones de toneladas de CO2 a la atmósfera.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_