Novacaixa acumula ya una bolsa de 3.000 pisos sin vender

De entre los muchos deberes que tienen pendientes las cajas de ahorros, uno de los más perentorios es la necesidad de soltar cuanto antes lastre inmobiliario acumulado durante los años dorados del ladrillo. Bankia (el banco de la antigua Caja Madrid) y La Caixa, rivales comerciales, ya han avanzado que agruparán toda la vivienda de sus carteras en una única sociedad que comenzará a funcionar en septiembre y que está abierta a que participen otros bancos. Novacaixagalicia tiene sus propios planes.

La entidad fusionada ha convertido Adapa, la exfilial de Caixa Galicia, en NCG Grupo Inmobiliario, que a su vez acaba de absorber a la empresa equivalente de Caixanova. El número de pisos que ofrece en Internet a través del portal escogecasa.es ha crecido en los últimos cuatro meses en medio millar de ofertas, y ahora ya supera las 3.000.

La entidad plantea financiar nuevos pisos para dar salida a sus solares

Adapa Conducto cerró el año 2010 con unas pérdidas de 168 millones de euros, un balance negativo que constituye un récord entre las filiales de Novacaixagalicia. El agobiante deterioro del sector de la construcción llevó a la caja fusionada a inyectar en sus filiales inmobiliarias el año pasado un total de 1.441 millones de euros en cuatro préstamos de distinta naturaleza. Esta cantidad fue un 83% más elevada de la reconocida por Caixa Galicia y Caixanova por separado un año antes, cuando los créditos con sus filiales del ladrillo alcanzaron los 785 millones, según un informe remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

Ahora y bajo el paraguas de un nuevo proyecto comercial, la entidad que presidirá José María Castellano ha organizado una intensa campaña de comercialización a través de tres vías distintas. El mencionado recurso de Internet, a través de un equipo comercial propio y con la colaboración de 150 agentes de la propiedad inmobiliaria distribuidos por toda España. "La prioridad, siempre que el mercado lo permita, es la venta, pero si la operación no resulta rentable se optará por el alquiler como segunda opción", explica un portavoz.

Mucho más complicado será colocar el suelo que las cajas asumieron durante los últimos años por impagos de promotores. Pese a la que está cayendo, la caja que pronto operará como banco a todos los efectos se plantea financiar nuevas construcciones para aprovechar los solares y dar salida luego a las viviendas. Como complemento, en las hipotecas ya ha suprimido las cláusulas de suelo y techo que establecían tipos de interés mínimos y máximos.

"La financiación concedida por Novacaixagalicia para la promoción de viviendas o para su adquisición por parte de las familias, unido a los activos inmobiliarios adjudicados, alcanza los 30.363 millones de euros". El dato figura en la memoria que Novacaixagalicia envió al Ministerio de Economía a finales de enero. La exposición al ladrillo supone el 55% del riesgo total de la entidad. Adapa, la exfilial de Caixa Galicia, tuvo que hacer frente a dos importantes ampliaciones de capital en 2009. Ambas operaciones, por importe de 116 millones y 131,8 millones fueron cubiertas con "diversos bienes inmobiliarios" sin aportación directa de fondos.