_
_
_
_
_
Reestructuración del sector financiero

Caixa Penedès y Caixa Laietana citan a sus consejos para abordar una fusión

Las entidades plantean dar un salto posterior con otros socios no catalanes

Hace semanas que Cataluña espera la oficialización de su tercera fusión de cajas y el momento se acerca por fin. Fuentes financieras confirmaron anoche la convocatoria de un Consejo de Administración extraordinario de Caixa Laietana para mañana, en paralelo al que tendrá lugar en Caixa Penedès; este último es ordinario, pero, de forma reveladora, ha sido adelantado 24 horas. Las cúpulas directivas de ambas darán cuenta en ellos de los contactos que han desplegado con vistas a una posible integración, que nace con la voluntad de no quedarse ahí, sino de ir al menos a por otro socio. Las cajas declinan dar nombres. Se han barajado desde Ibercaja, que algunas fuentes descartan ya, a Sa Nostra y la CAI, entre otras. No se excluyen alianzas sin fusión o compras de activos. De aprobarse esta operación, Cataluña pasaría de 10 a cuatro cajas.

CAI, Sa Nostra e Ibercaja son algunas de las cajas con las que ha habido contactos

Caixa Penedès tiene unos activos cercanos a 23.000 millones de euros, más del doble que Laietana (9.500). Juntas, pues, con 32.500 millones, constituirán, si hay operación, la cuarta caja catalana por tamaño. Por delante tendrán a La Caixa y a la resultante de la suma de Catalunya, Tarragona y Manresa. El tercer puesto se lo arrebatan las cajas comarcales de Girona, Manlleu, Terrassa y Sabadell, con 34.567,1 millones.

Penedès es mayor que Laietana, pero ésta tiene un arraigo muy fuerte en el Maresme. La red de Laietana, que dirige Josep Ibern, está muy concentrada en Cataluña, donde cuenta con 249 de las 277 sucursales que tiene. Las otras 28 están en la Comunidad de Madrid. Por el contrario, la caja dirigida por Jaume Pagès, presumible hombre fuerte de la nueva caja, cuenta con 662 oficinas (574 en Cataluña, 32 en la Comunidad Valenciana, 31 en la de Madrid y 25 en Aragón). Ambas suman 4.000 empleados.

Hasta hace horas, Laietana no ha cambiado su discurso oficial, que consiste en afirmar su independencia y que desea seguir en solitario, aunque ha admitido haber participado de los contactos informales de "todos con todos" y no ha escondido que "la lógica" de las complementariedades apuntaba hacia una fusión con actores no catalanes. En más de una ocasión ha dicho que, si acababa dando un paso, sería porque la obligaban. Penedès ha intentado sin éxito bodas fuera de Cataluña, mal vistas por la Generalitat, y no descarta una operación de crecimiento posterior a esta eventual fusión con Laietana, con vistas a 2010.

Algunas fuentes sindicales han hecho sus cábalas sobre eventuales excedentes de plantilla y los han situado en 400 personas. A saber si será tan difícil de alcanzar un pacto como en el caso de Manresa, Tarragona y Catalunya. Tras una nueva reunión celebrada ayer, las entidades dieron cuenta de "avances", pero no fue posible sellar un acuerdo laboral. Las cajas propusieron dar dos años de plazo para que "un número importante" de oficinas ahora en pérdidas puedan entrar en beneficios, de modo que se reduciría el ajuste inicial presentado (500 oficinas). El alcance de este ajuste, con un listón de 1.800 empleados, es lo que ha puesto en pie de guerra a los sindicatos. Las cajas insistieron en que irse de la entidad es "voluntario", de modo que si las condiciones de prejubilaciones y bajas voluntarias no convencen a los 1.800 empleados, la cifra sería menor. También hubo acercamiento en la homogeneización de las condiciones laborales de las tres cajas en pagas, aportaciones a fondos de pensiones, coberturas de riesgos, clasificación de oficinas y carrera profesional. Hoy seguirá la negociación.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_