_
_
_
_
_

La recesión obliga a Simon a despedir a 80 trabajadores

La crisis inmobiliaria empieza a extenderse por el resto de sectores. El fabricante de pequeño material eléctrico Simon anunció ayer la presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE) en su fábrica de Barcelona para 80 trabajadores, debido a una caída de las ventas próxima al 35%. La plantilla total de esta planta es de 147 personas.

Simon tiene cinco fábricas y emplea a 700 empleados, 200 menos que a principios de año. El ERE sólo afectará a la de Barcelona y llega después de un plan de prejubilaciones y bajas incentivadas en todo el grupo al que se han inscrito algo más de un centenar de trabajadores, una medida insuficiente, según la empresa, para hacer frente a la crisis.

El director general de Simon, Xavier Torra, ya anunció en enero "medidas de austeridad" para hacer frente al parón, como no renovar a 200 trabajadores eventuales.

Otro fabricante, en este caso de muebles, Varo, también ha presentado un ERE para 45 trabajadores en su centro de Sant Pere de Ribes (Garraf). Emplea a 104 personas. Plantea una indemnización de 30 días por año trabajado con un máximo de 13 mensualidades.

Por otra parte, la textil Colorfil anunció ayer el cierre de su fábrica de Ripoll y el despido de 21 personas. Asegura que arrastra como mínimo dos ejercicios consecutivos con pérdidas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_