Insuficiente triunfo del Atlético sobre el San Antonio
El Atlético se jugó ante el San Antonio la última baza que le quedaba para conseguir el título de Liga. Para ello necesitaba ganar él, encuentro por dieciséis goles más de lo que el Calpisa lo hiciera en Eibar ante el Arrate. Los nervios, como es de suponer, estaban a flor de piel y los suspicaces tenían tema de comentario sobre la prima de los alicantinos a los pamplonicas. La actuación de los del San Antonio lo propició aún más, con su juego lento, pausado, provocando pérdidas de tiempo, y, sobre todo, cuando al final saltaron de júbilo por el marcador obtenido.
Circunstancias extradeportivas al margen, el Atlético planteó bien el partido en el primer tiempo, tratando de buscar la goleada sin precipitaciones. Trabajó bien en defensa y se mostró muy eficaz en ataque; no obstante, el peso de la ventaja a obtener influía en los nervios rojiblancos, ya que se dejaban entrever a pesar de la franquía que suponía la marcha de¡ marcador. Del 0-1 a poco de comenzar se pasó al 5-1 en unos minutos y, aunque el San Antonio consiguió reducir hasta un 6-4, unos momentos estelares de los de Juan de Dios Román pusieron el 13-5 en el minuto veinte en el marcador, con todas las esperanzas intactas de Conseguir el objetivo. No menos, satisfactorio' fue el resultado con que se alcanzó el descanso (18-7). Para el segundo tiempo quedaba el aumentar en cinco goles más la ventaja y empezar la lucha particular con el marcador que el Calpisa hiciera en Eibar.En la última media hora las lanzas se tornaron cañas y todos los aciertos que se habían producido antes de¡ descanso se convirtieron en un tratado de despropósitos. De cara a la puerta rival se seguía acertando, pero la defensa fue un desbarajuste completo, empezando por los porteros: Pagoaga no tuvo su día y Díez Cabezas, en once minutos que actuó, encajó seis goles. La línea de cobertura, con una obstinación constante por robar el balón al pausado juego rival, propició unos huecos muy bien aprovechados por los navarros y sobre todo por Sánchez, que goleó como quiso ante el desconcierto de los locales. En el Atlético estuvieron bien Alonso, aunque tardó en coger el tiro, De Andrés y los contraataques de Parrilla (el mejor extremo que en esta ocasión tuvieron los colchoneros). La Liga no la perdió el Atlético en este partido, sino que ya venia a remolque desde su incomprensible tropiezo en Granollers.
Atlético de Madrid. Pagoaga (Diez Cabezas); Muñoz, Alonso (11 dos de penalti), Manrique (7,. cinco de penalti), Aperador, Novales (4), De Andrés (8, tres de penalti), Parrilla (4), Morante (2), González (1).
San Antonio. Beursa; Luquín, San Martín (2, uno de penalti), Goya, De Alfonso, Rico, Escobosa (3), Ortigosa (1), Sánchez (11, cuatro de penalti), Echeverría (3), Eslava (3).
El Calpisa, campeón
Los alicantinos del Calpisa obtuvieron su cuarto título merced al triunfo que obtuvieron sobre el Arrate y al resultado que el Atlético hizo ante el San Antonio. Los alicantinos ganaron en Eibar por 27-20. Los anotadores del encuentro fueron por el Calpisa: Melo, Goyo y Mario, con cuatro goles; Novoa, con once; Tauré, dos, y Gómez y Castaño, con uno. También jugaron Perramón y Núñez en la portería y Cascallana, Labaca y Poli. Con estos resultados y acabada ya la competición el Calpisa es campeón, seguido de¡ Atlético. Promocionan Canteras y Bidasoa y descienden Anaitasuna y Arrate, sustituidos por Michelín y Helios.
En otro orden de cosas, el Granollers se proclamó campeón de España juvenil al vencer en la final al Atlético por 27-11.
