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Crónica:FÚTBOL | Novena jornada de Liga
Crónica
Texto informativo con interpretación

La Real confirma su recuperación ante un débil Numancia

Una jugada extraña decidió quién de los dos que ayer jugaban en Los Pajaritos era mejor, o menos malo, porque la Real Sociedad y el Numancia dejaron señales de por qué su situación en la clasificación es la que es, por qué tienen un problema con el gol y por qué están condenados a sufrir. El choque había entrado definitivamente en vía muerta mediada la segunda parte, cuando la Real sacó un córner, el balón pareció irse por la línea de fondo y regresar al campo y los defensas sorianos alzaron los brazos y se olvidaron de defender. Luiz Alberto enganchó el cuero, lo mandó al otro lado y acabó muerto a los pies de Labaka para que lo empujara a la red. El embrollo en el que los dos equipos habían metido el choque encontraba una solución favorable; eso sí, para quien más lo había buscado.

NUMANCIA REAL 0 - SOCIEDAD 2

Numancia: Juanma; Velasco, Ochoa, Molina, Pignol; Miguel Pérez (Lee Chun Soo, m. 59), Ros, Palacios, Juanlu (Moreno, m. 73); Pineda (Sestelo, m. 74) y Osorio.

Real Sociedad: Riesgo; Rekarte, Labaka, Luiz Alberto, Garrido; Mikel Alonso, Aranburu; Karpin (Xabi Prieto, m. 84), Nihat (Gari Uranga, m. 91), Rossato (Arteta, m. 79); y Kovacevic.

Goles: 0-1. M. 68. Nihat saca un córner, la defensa soriana reclama que el balón se ha ido por línea de fondo y Labaka, en el área pequeña, remata a la red.

0-2. Min 80. Nihat se escapa por la derecha, llega a línea de fondo, pasa atrás y Karpin marca a puerta vacia.

Árbitro: Teixeira Vitienes. Amonestó a Juanlu, Ros, Rekarte y Mikel Alonso.

Unos 10.000 espectadores en Los Pajaritos.

Amorrortu había planificado la tarea por fases y desnudó su estrategia desde el primer momento. Llenó el centro del campo de futbolistas y la Real salió victoriosa de esa primera batalla por amontonamiento. No había forma de que Ros o Palacios encontrasen un balón sin una bota rival por delante. Nihat retrasó su posición, Mikel Alonso la adelantó y, con cinco jugadores presionando, al Numancia no le quedó otra que liarse a balonazos que morían plácidamente a los pies de los centrales de la Real sin que el sofocón de los delanteros sirviese para algo más que para engordar la frustración de un grupo que cada día está más hundido.

El descanso modificó la situación y el Numancia comenzó a encontrar huecos y, cuando la Real comenzaba a sentirse acorralada en su área, llegó el gol de Labaka. Poco antes Francisco había metido oxígeno en la delantera buscando una pequeña revolución con la entrada de Lee Chun Soo, el surcoreano cedido por la Real al Numancia, que acertó a enviar un libre directo al palo. Pero la Real se sentía dueña del choque y sólo esperaba que la ocasión fuera propicia para encontrarse con la sentencia. Llegó de la mano de Nihat, que en un contragolpe fulgurante dejó a Karpin solo y con la portería vacía para sentenciar el partido y la segunda victoria consecutiva de la Real, que comienza a enmendar su mal comienzo.

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