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Reportaje:LIGA DE CAMPEONES | Ida de los cuartos de final

La bestia fue Ibrahimovic

Almunia se luce en el primer periodo, pero sucumbe luego ante el goleador sueco

Antes de golear al Oporto y clasificarse para los cuartos de final, Manuel Almunia, pamplonés del barrio de Iturrama, concedió una entrevista a ETB. "El Barcelona es como una bestia y, cuando despierta, sabes que va a meter uno, dos tres goles y los que haga falta porque no habrá quien la pare", dijo. Ni siquiera se imaginaba entonces, él, que siempre fue culé, que se las iba a ver por segunda vez en su vida con el Barça. La primera fue en París, en 2006. Empezó en el banquillo y terminó jugando tras la expulsión de Lehmann. Como ayer, tardó en claudicar, pero, al final, Belletti se la coló entre las piernas y la Copa de Europa se celebró en Barcelona.

La bestia pasó por el Emirates vestida de amarillo y, en una primera parte impresionante, pudo meter uno, dos, tres goles o los que hicieran falta. Almunia lo impidió. Debería sentirse orgulloso, por mucho que en la primera acción del segundo tiempo midiera mal la salida e Ibrahimovic la pasara por encima de su cabeza. El Barça necesitó 16 disparos a puerta para doblegarle. Al poco, en otro desmarque parecido del sueco, se quedó bajo los palos. De nada le sirvió: Zlatan la reventó y la coló por la escuadra.

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Mucho encanto y poca malicia

Ibra, que nunca había marcado en Inglaterra en los tres partidos que había disputado (ante el Arsenal, en 2006; frente al Manchester United, hace dos años, y contra el Liverpool, el curso pasado), logró ayer dos dianas. Lleva 15 goles en la Liga y cuatro en Europa, dos más de los que llevaba marcados Eto'o a estas alturas en la pasada Champions. "Ha jugado muy bien. Ya estaba contento con él antes del partido. Nos ha vuelto a ayudar mucho, más allá de sus goles", dijo Pep Guardiola.

La hinchada del Arsenal, ajena al meneo que le estaba dando el campeón, se arrancó a animar a sus chicos como si, en vez de haber recibido ya once disparos a puerta, hubieran encerrado al Barcelona en su área. Pero si el cuadro azulgrana no destrozó el marcador fue porque Almunia rechazó hasta siete veces el balón cuando ya se colaba. Otra le ayudó Sagna. "Cuando un portero juega como lo ha hecho Almunia, es complicado marcar un gol. Ha sido impresionante", aseguró Busquets. "Parecía tener tres brazos", bromeó Xavi. "Les hemos podido meter cinco", añadió. El balón regresaba una y otra vez a la portería de un tipo que jamás ha corrido un encierro, pero que ayer conoció otra bestia. "No he salvado a nadie. El trabajo es de todos", dijo Almunia, que conoció en sus carnes lo que ya intuía, lo que había avisado: "Cuando la bestia despierta, no hay quien la pare".

Almunia desvía un tiro de Xavi.
Almunia desvía un tiro de Xavi.ASSOCIATED PRESS

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