_
_
_
_
_

Las huelgas más importantes

En 1972 se inicia en Vigo el despegue reivindicativo a nivel público. En marzo de aquel año se producen los sucesos de El Ferrol. La negociación del convenio en la Empresa Nacional Bazán desemboca en una serie de encierros y una manifestación, con la consiguiente represión policial, saldada con el balance de dos muertos (los obreros y sindicalistas de CC OO Amador Rey y Daniel Niebla) y numerosos heridos de bala. Vígo pone en marcha una cadena de paros bajo el lema de "Vigo con El Ferrol". Aunque empresas como Vulcano y Citroën participaron activamente, no se produjeron represalias, con lo que el movimiento obrero vigués salió reforzado de la situación.El optimismo había de durar poco. En septiembre de ese mismo año se producen una serie de despidos de dirigentes sindicales en Citroën, lo que acarreará la más amplia, movilización vivida por Vigo durante el régimen franquista. Las acciones de solidaridad con los despedidos paralizaron durante 15 días la industria local. La represión policial y judicial descabezó en esta ocasión a los cuadros sindicales. Son más de 500 los despidos registrados y numerosos e importantes procesos los que tuvieron lugar en las magistraturas.

Más información
Un barco a punto de irse a pique

Las posteriores movilizaciones obreras tendrán como argumento la amnistía sindical. El 1 de mayo de 1975 ha quedado en los anales sindicalistas de Vigo como fecha clave del movimiento obrero. Ese día se produjo una manifestación que congregó nuevamente a unas 10.000 personas, exhibiéndose por vez primera pancartas de CC OO.

1977 será un año conflictivo. Conflictividad protagonizada esencialmente por los trabajadores de Ascon (Astilleros y Construcciones, SA), quienes se mantuvieron en huelga durante nueve meses. Durante este tiempo, los obreros salen a la calle en mono de faena cortando el tráfico y realizando llamamientos de solidaridad a toda la población.

La primera cifra récord de participación masiva en una manifestación tendrá lugar el 4 de diciembre de 1979: salen a la calle unas 200.000 personas, convocadas desde sindicatos, instituciones políticas, sociales y culturales, pidiendo autonomía para Galicia. Una cifra similar a la anterior se barajará el 15 de abril de 1983, fecha que quedará en la historia de las movilizaciones gallegas. En aquel momento, el paro se estimaba en un 19%, de la población activa.

La experiencia del 15-A intentó repetirse el pasado 14 de febrero con una llamada a la huelga general. Se consiguieron los objetivos de paralización total de la comarca y se concentraron unas 30.0.000 personas en las calles de Vigo. En esta ocasión se pedía negociación sobre la reconversión industrial de la zona.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_