_
_
_
_
_
El futuro de Zapatero

Botín pide aplazar el debate sucesorio

Los empresarios reclaman a Zapatero mano firme - El presidente piensa agotar la legislatura y anuncia que no supeditará las medidas al calendario político

El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, secundado por otros grandes empresarios, entre ellos, Borja Prado (Endesa), Rafael del Pino (Ferrovial) y Juan Miguel Villar Mir (OHL), recomendaron ayer a José Luis Rodríguez Zapatero que agote la legislatura y aparque el debate sucesorio hasta 2012, en nombre de la estabilidad económica. Fue el mensaje político más trascendente de la reunión que el presidente del Gobierno mantuvo en La Moncloa con los 41 ejecutivos más importantes del país.

Zapatero quería escuchar la opinión de la élite empresarial -que suma la mitad del PIB- sobre las medidas que España abordará para cumplir el Pacto del Euro. El encuentro continuaba el celebrado el 27 de noviembre. Los empresarios reconocieron a Zapatero que desde entonces la estabilidad económica del país ha mejorado de "forma clara" como consecuencia de las reformas del Gobierno. "No hay ningún otro elemento [más allá de la recuperación económica] que condicione el calendario político, que tiene que ser siempre secundario a lo que este país tiene aún que hacer", precisó el líder socialista.

El líder socialista promete reunirse de nuevo con ellos en tres meses
La posición empresarial es una descalificación a la estrategia de Rajoy
Más información
Los empresarios se ofrecen a mediar con la oposición para grandes pactos
"La prima de riesgo es un marcapasos que sigo día a día"
El jefe del Gobierno pide apoyo para un plan de becas destinado a 30.000 jóvenes
ZP, el peor candidato para el PP
La sucesión divide al grupo de socialistas que impulsó al presidente
Rajoy se rodea de pymes mientras el PP se aleja de Botín
Fernández Vara apuesta por Rubalcaba frente a Chacón en el debate sucesorio

Los empresarios reunidos ayer en La Moncloa con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, le pidieron que no le temblara el pulso a la hora de avanzar en las reformas económicas. El jefe del Ejecutivo, que valoró el encuentro como "extraordinariamente útil" en la rueda de prensa posterior, se comprometió a volverles a reunir en pocos meses, tras asegurar que no bajaría la guardia en el cumplimiento de su labor.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Zapatero precisó que en mayo el principal problema que presentaba la crisis económica era la reducción del déficit; hace menos meses, el saneamiento del sistema financiero; y hoy que las reformas económicas culminen y sean profundas para mejorar las expectativas de crecimiento y propulsar la creación de empleo.

En teoría, Zapatero les iba a explicar y a recoger sus opiniones sobre el desarrollo de la cumbre europea de esta semana en Bruselas, el paquete de medidas económicas anunciado tras la cita, y el cumplimiento de los compromisos nacionales.

Y por esos derroteros discurrió la mayor parte de las cuatro horas de reunión. Sin embargo, una intervención del presidente del banco Santander, Emilio Botín, cambió el rumbo de la jornada. Puesto en pie, el presidente del banco Santander le recomendó a Zapatero, con su habitual claridad, que aparcara el debate sucesorio en el PSOE. "No tome usted ninguna decisión sobre su futuro hasta 2012 porque el país necesita estabilidad, los mercados necesitan estabilidad y cualquier anuncio de ese tipo crea inestabilidad", desgranó.

Las palabras de Botín fueron refrendadas posteriormente por Borja Prado, presidente de Endesa, Juan Miguel Villar Mir (OHL), Rafael del Pino (Ferrovial) y Antonio Vázquez (Iberia), así como por referencias de otras intervenciones de los 41 empresarios presentes en La Moncloa, algunas de ellas en tono adulador al reconocer la implicación de Zapatero en el proceso de reformas.

Seguro que, viniendo de quien vienen, de la élite empresarial, Zapatero va a tener muy en cuenta esas palabras en medio del debate abierto en su partido sobre la conveniencia o no de que clarifique a corto plazo si decide o no presentarse a un tercer mandato en las elecciones generales de 2012.

Ayer mismo, en la rueda de prensa posterior al encuentro que ofreció en La Moncloa, Zapatero adelantó algunas pistas, al aclarar que el logro de las reformas económicas y su consolidación están por encima del calendario político. "No hay ningún otro elemento [distinto a las reformas] que condicione el calendario político, que tiene que ser siempre secundario a lo que este país tiene aún que hacer. Las medidas económicas, las reformas no están condicionadas a ninguna otra circunstancia", precisó.

Zapatero ya ha dado muestras en su trayectoria política y a lo largo de estos últimos días de que los retos del Gobierno -en este momento las reformas económicas españolas, los desafíos europeos frente a la crisis económica y la guerra de Libia- están por encima de las cuestiones internas de su partido. Prueba de ello es que esta semana su intensa dedicación a la política internacional y económica, coronada con su participación en la cumbre europea del jueves y viernes, no le han dejado tiempo para atender a las cuestiones de partido.

Zapatero, aunque ayer no lo dijo en la reunión con los empresarios, también tiene claro, según su entorno, que va a agotar la legislatura hasta marzo de 2012 y que tiene apoyos políticos suficientes en el Parlamento para hacerlo. No tiene intención de adelantar las elecciones porque quiere profundizar y consolidar el plan de reformas económicas que precisó ayer ante los empresarios: negociación colectiva; estabilidad financiera; estabilidad presupuestaria para todas las administraciones; política energética; etcétera.

La posición manifestada ayer por la élite empresarial de que agote la legislatura es un espaldarazo a la pretensión de Zapatero, coincidente con la de los empresarios. Pero la posición empresarial es, a su vez, una descalificación en toda regla a la estrategia de oposición de Mariano Rajoy y del PP de provocar unas elecciones anticipadas.

La élite empresarial no coincide con la cúpula popular en su tesis de que la solución a la crisis pasa por una rápida sustitución del Gobierno de Zapatero.

También tiene su importancia la reclamación empresarial a Zapatero de que retrase la decisión de abrir el debate sucesorio, que algunos dirigentes territoriales socialistas pretendían que se materializara en el comité federal socialista del próximo sábado 2 de abril, mes y medio antes de la celebración de las elecciones autonómicas y municipales.

Esta posición refuerza a quienes en el seno del PSOE quieren que Zapatero aplace el pronunciamiento sobre su futuro y la apertura del debate sucesorio, que temen que en caso contrario su liderazgo se resienta, y eso repercuta en tareas gubernamentales como las que le reclaman los empresarios, poniendo en bandeja al PP su estrategia de adelanto electoral.

Zapatero ya hizo saber antes de la reunión de ayer que tanto la decisión sobre su futuro político como la estrategia que le acompaña sólo la conoce él y nadie más que él. Con ello trata de pinchar el debate sucesorio.

También ha precisado que no habrá un preaviso a la decisión sobre su candidatura a un tercer mandato. Con ello pretende que se rebajen las expectativas políticas creadas en torno al comité federal del 2 de abril por parte de algunos líderes territoriales.

Solo Zapatero sabe, en este momento, el contenido preciso de su intervención ante el comité, en la que volverá a poner en valor los logros y los retos reformistas del Gobierno y dibujará el horizonte político y electoral de mayo.

José Manuel Lara, Antonio Brufau, Juan Rosell, Alfredo Pérez Rubalcaba, Zapatero, Elena Salgado, César Alierta y Emilio Botín, en un momento de la reunión en La Moncloa.
José Manuel Lara, Antonio Brufau, Juan Rosell, Alfredo Pérez Rubalcaba, Zapatero, Elena Salgado, César Alierta y Emilio Botín, en un momento de la reunión en La Moncloa.ULY MARTÍN

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_