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La Generalitat cuantifica en 26 millones la rebaja del 5% de los billetes de tren

El Gobierno catalán se ha manifestado en contra de la medida

El portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, ha cifrado hoy en 26 millones de euros el coste para la Generalitat de rebajar un 5% las tarifas de los billetes de Cercanías y media distancia de Renfe y ha asegurado que la cifra aumentaría si el recorte se extendiese al total del sistema tarifario integrado. El Gobierno anunció el pasado viernes que los billetes de tren de cercanías y media distancia se reducirán un 5% a partir del 7 de marzo para incentivar el uso del transporte público e intentar contener así la subida de la factura eléctrica en plena crisis internacional del petróleo.

Homs, en declaraciones a Catalunya Ràdio, ha afirmado que, en caso de bajar las tarifas de los billetes de Cercanías, la rebaja también debería aplicarse al resto del transporte público del área metropolitana de Barcelona, puesto que el billete es integrado con metro y Ferrocarriles de la Generalitat. "Esto no es una broma, el coste son 26 millones cuando la cosa no está para tirar cohetes. Es evidente que si es la Generalitat la responsable de fijar las tarifas del servicio de Cercanías y del de Regionales, lo que no podría es aplicarlo aquí y no aplicarlo al conjunto del sistema tarifario integrado y a los Ferrocarriles de la Generalitat. No tendría sentido", ha manifestado.

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Joaquim Nadal ha desmentido sin embargo esta mañana que la Generalitat no pueda llevar a cabo la rebaja en Rodalies por cuestiones económicas. Según el presidente del grupo socialista en la oposición y ex consejero de Infraestructuras, el Estado es quien cargará con los menores ingresos. "No nos tiene que costar un duro", ha asegurado Nadal en declaraciones a Catalunya Ràdio. Insiste en que Homs ha tomado el camino más fácil al decir que si no se aplica es por una cuestión económica. Nadal ha defendido que "el acuerdo de traspaso se hizo bien, y esto hace que el déficit de explotación de Renfe por lo que respecta a la bajada del 5% en el billete forme parte de déficit de explotación y lo asuma por completo el Estado. No les cuesta dinero ni tiene por qué costarle dinero a la Generalitat. Creo que nos debemos acostumbrar a no fabricar más conflictos de los que tenemos". Por su parte, el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, ha reclamado que su área metropolitana y toda Catalunya "no sean la excepción" a la política general de abaratamiento del transporte público.

La rebaja de los billetes de tren será el primer incendio que el Gobierno deba abordar con Artur Mas (CiU). El Ejecutivo catalán está muy molesto porque, teniendo las competencias para fijar el precio de los billetes, no fue informado de los planes de Fomento y ahora deberá recortar otras partidas. "Ellos invitan a café, la gente se toma el café y después dicen que pagues la cuenta. No es asumible. Hay que decir basta, por aquí no pasaremos", protestó ayer el portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs.

En Cataluña, autobuses, metro, ferrocarriles de la Generalitat y Rodalies (así se llama Cercanías desde que se transfirió su gestión a la comunidad) suman más de 900 millones de viajes al año. Para rebajar el precio, el problema técnico que pone la Autoridad del Transporte Metropolitano es que, al existir una tarifa integrada para todos (con un abono de 10 trayectos se puede viajar en todos e incluso hacer transbordos), bajar solo el tren sería complejo. Y bajarlo todo, inviable: con lo que el usuario paga al comprar un billete sencillo (1,45 euros) se cubre el 40% del coste real del viaje. Para suplir el resto, el Gobierno central aportó 150 millones en 2010 (un 22% menos que en 2008); la Generalitat, 291 millones (un 12% más); el Ayuntamiento de Barcelona, 98 millones y el Área Metropolitana otros 93 millones.

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