EL JUICIO POR EL 'CASO LASA-ZABALA' Iruin afirma que hay que impedir una tercera generación de terrorismo de Estado
El turno de los alegatos de la acusación concluyó ayer en el juicio por el caso Lasa-Zabala. El abogado Iñigo Iruin, que representa a las madres de los etarras asesinados, afirmó que espera que con el juicio y una sentencia condenatoria "se puedan sentar las bases para impedir que en el futuro pueda surgir una tercera generación de terrorismo de Estado".Iruin aludía así a la primera parte de su informe en el que señala que hubo una primera generación de terrorismo de Estado, representada por el Batallón Vasco Español, la Triple A o Antiterrorismo ETA, en tiempos de la UCD; y una segunda generación con el Gobierno socialista, con los GAL. El letrado parafraseó al escritor italiano Leonardo Sciascia y señaló que en amplios sectores del País Vasco se ha creído durante años que el Estado era el gran delincuente impune, y añadió que espera que la sentencia condenatoria que en su opinión debe producirse en este juicio contribuya a reparar el sufrimiento de las familias de las víctimas y a contrarrestar el aserto de Sciascia, para evitar así una posible tercera generación de terrorismo de Estado.
La prueba de Bayo
El letrado Iruin, que pide 114 años de cárcel para el general Enrique Rodríguez Galindo y el ex gobernador Julen Elgorriaga; 112 para el comandante Ángel Vaquero y los ex guardias civiles Enrique Dorado y Felipe Bayo; 13 para Rafael Vera y ocho para el abogado Jorge Argote, realizó un análisis exhaustivo y minucioso de las pruebas que existen contra los acusados.
Precisó que sólo con la intervención de Bayo en el proceso está probada la imputación de los acusados en los secuestros, torturas y asesinatos de Lasa y Zabala, y analizó las declaraciones sumariales del exguardia de Intxaurrondo y su retractación en el juicio. Bayo dijo en sus declaraciones incriminatorias de agosto de 1997 que primero había sido el silencio y luego la verdad, aludiendo a que en su primera declaración ante el juez no había querido declarar y que luego confesó. Iruin aprovechó este aspecto para señalar que primero fue el silencio, luego la verdad y finalmente la mentira, y desmenuzó las afirmaciones de Bayo y la cinta grabada en la cárcel por el acusado cuya veracidad no le ofrece dudas, por los datos que contiene y han podido ser corroborados.
Gonzalo Valcarce, en nombre del Ayuntamiento de Tolosa, resumió los hitos del proceso y señaló que las acciones contra ETA fueron "una decisión política amparada por la mayoría parlamentaria que tenía el PSOE en aquella época".
A partir del lunes se entra en la recta final del juicio, con los informes de las defensas.
