El PP propone un profesor en catalán y otro en español por aula
El Partido Popular catalán se ha decidido finalmente por concretar su modelo lingüístico para las escuelas tras años de vaguedades e indefiniciones sobre si segregar o no a los alumnos según su lengua materna. La candidata a la presidencia de la Generalitat, Alicia Sánchez-Camacho, presentó ayer sus propuestas sobre educación, que contemplan, entre otras medidas, otorgar mayor libertad de elección a los padres. Estos podrán escoger la lengua en que se eduque a sus hijos, pero solo en la etapa infantil (hasta los seis años). Tanto si es en catalán o en español, los alumnos asistirán todos juntos al mismo aula pero tendrán profesores diferenciados según el idioma, lo que irremediablemente conduciría a un ostensible incremento de las plantillas docentes. Este sistema ya está contemplado en la legislación actual, pero con un único profesor durante el primer curso.
A partir de los seis años -educación primaria y secundaria-, las asignaturas se impartirían en catalán y español, con un mínimo del horario lectivo del 33% para cada una. Este porcentaje podría aumentar en función de la realidad lingüística de cada centro, es decir, si en el uso habitual de los estudiantes una de las lenguas predomina sobre la otra. El tercio restante del tiempo se dedicaría al inglés y, una mínima parte, a otra lengua extranjera.
Sánchez-Camacho negó ayer que el castellano fuera un idioma "infravalorado" en el sistema educativo catalán, pero precisó que, merced al Gobierno tripartito, únicamente puede estudiarse en "situaciones excepcionales". Y exhortó al próximo Ejecutivo a cumplir la ley y a que todos los centros impartan la tercera hora de castellano.
