Viaje al centro de la tierra

Son 3,9 kilómetros, cinco estaciones, algunas a 80 metros bajo tierra, todas ellas en la localidad de Santa Coloma (Barcelona). La inauguración de la primera línea de metro automática de España ha arrasado: 25.000 personas la utilizaron ayer por pura curiosidad. Esta mañana, la cosa estaba más calmada: tenía pasajeros, pero sin exagerar y, la mayor parte de ellos no iban a ninguna parte. Entraban, procuraban colocarse en la parte frontal del primer vagón donde, al no haber cabina de conducción, se puede apreciar cómo el convoy se adentra en el metro, los cambios de aguja e incluso una estación intermedia, la de Santa Rosa, que se halla aún en construcción. La satisfacción era generalizada.

Los residentes en los barrios a los que el nuevo metro pone en conexión con la línea 1, que lleva al centro de Barcelona, estaban satisfechos. Y los meros curiosos, que eran mayoría, también. Por supuesto, siempre hay algún inconveniente. Pere Adell, que estaba en el metro "para ver cómo era", lamenta que la alta tecnología de la línea no sirva para tener cobertura en los teléfonos móviles y que los bancos del andén tengan un diseño que hace difícil sentarse sin darse un coscorrón en la nuca o mantenerse encorvado.

La línea está totalmente automatizada: al parar el metro, las puertas del vagón coinciden con las de los andenes, que están totalmente cerrados, de modo que nada ni nadie puede caer a la vía. Las estaciones se hallan a gran profundidad, debido a la orografía.De modo que los accesos se hacen con ascensores de gran capacidad, programados para estar en el vestíbulo en el momento en que llega un tren. Hay escaleras, pero sólo para casos de emergencia.

Los trenes discurren por un único túnel partido en dos, de modo que la parte superior se utiliza para un sentido y la inferior para el otro. Una segunda parte de la línea, que la conectará ya con Barcelona y Badalona, será puesta en servicio en el primer trimestre de 2010. La totalidad de ella, que cruzará toda la ciudad de Barcelona hasta llegar al aeropuerto de El Prat, no funcionará hasta 2014, aunque algunos tramos se pondrán en servicio en 2011 y 2012.