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La zona 30 del centro de Valencia entrará en vigor el miércoles

Los cortes del tráfico nocturno para frenar la contaminación acústica siguen pendientes

Si se cumplen las previsiones del Ayuntamiento de Valencia, el centro histórico será más tranquilo a partir del próximo miércoles. La delegación de Tráfico, dirigida por Alfonso Novo, ha anunciado que la ampliación de la zona 30 empezará a aplicarse desde entonces. Esto supone que los coches circularán a una velocidad máxima de 30 kilómetros por hora en todos los barrios del casco antiguo.

Para Novo, los principales objetivos del crecimiento de la zona 30 son "compatibilizar la movilidad a las especiales características urbanas del entorno que no forman parte del viario principal de la ciudad; reducir el impacto ambiental por ruidos y emisiones de CO2 y que la bicicleta tenga preferencia" en el centro histórico.

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De esta manera, la nueva restricción se indicará en todas las entradas y salidas de la zona, en total en 32 calles. Desde el miércoles, no se podrá ir a más de 30 en calles tan emblemáticas del centro como Serranos, Maldonado, Mar o Poeta Querol. Hasta ahora, la zona de límite de velocidad se reducía básicamente al barrio de El Carme, mientras que ahora se extiende a todo el distrito de Ciutat Vella.

Por otra parte, Novo ya anunció que esta semana, a lo más tardar, empezarían los cortes nocturnos de tráfico en el distrito de Ciutat Vella, una medida adoptada por el Ayuntamiento para tratar de atajar el exceso de ruido en el centro que aún está pendiente. La delegación de Tráfico ha insistido en que, "si no esta semana la que viene", empezará a aplicar la restricción. La medida forma parte de las disposiciones que el Ayuntamiento aplica desde hace meses como paso previo a la aprobación definitiva de la zona ZAS (Zona Acústicamente Saturada) en Ciutat Vella. En el resto de ZAS -el entorno de la calle Juan Llorenç, de Woody y las inmediaciones de la plaza Xúquer- ya supone que los establecimientos de comida para llevar como los kebaps tengan que cerrar antes, y se intenta reducir el botellón y la actuación de músicos callejeros.

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