La OTAN tiende la mano al ingreso de Georgia

De visita en Tbilisi, el secretario general de la Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer, ha anunciado hoy la creación de la comisión OTAN-Georgia con el fin de reforzar la cooperación entre ambas partes. Scheffer también ha adelantado que la OTAN estudiará en su cumbre de diciembre si invita a Georgia al Plan de Acción para la Adhesión (MAP), considerada la antesala del ingreso y al que Moscú se opone tajantemente.

La OTAN ha señalado en varias ocasiones que Georgia podría unirse al organismo, aunque los miembros del bloque se han dividido a la hora de hablar de una invitación formal, que podría concertarse este diciembre en la cumbre de la organización. Scheffer se ha reunido hoy con el presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, y acompañado de 26 embajadores de países integrantes del organismo, Scheffer ha reafirmado que la respuesta de Rusia en la guerra del Cáucaso fue "desproporcionada".

El objetivo de la reunión del Consejo OTAN-Georgia, que se prolongará hasta este martes, es calcular los daños causados por la guerra con Rusia y "coordinar los esfuerzos para ayudar a Georgia a recuperarse del conflicto". Mañana la Cumbre debatirá medidas para "fortalecer la seguridad de Georgia". Mientras se produce esta reunión, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ha llegado a la región de Osetia del Sur para reunirse con el líder separatista de esta zona, Eduard Kokoiti, con el que abordó la amenaza latente que aún representa Georgia.Lavrov insistió en que la principal amenaza para la paz en el Cáucaso "proviene de Georgia".

Delegación civil

Hoy, precisamente, también la Unión Europea ha aprobado el envío de una misión de 200 observadores civiles a las zonas de seguridad situadas en territorio georgiano en torno a Osetia del Sur y Abjazia, tal y como acordó con Rusia tras la reunión entre delegados europeos y el Gobierno ruso. Los integrantes de la delegación deberán ser desplegados antes del 1 de octubre, a fin de permitir la retirada de las tropas rusas de las dos regiones rebeldes, que debe de producirse para el 11 del mes próximo.

Los ministros de Exteriores comunitarios han aprobado la llamada acción común, un documento que establece la base jurídica del despliegue, aunque aún no se ha producido en el Consejo de Ministros el debate político sobre la situación en Georgia. La misión europea y la retirada rusa de esas zonas fue acordada por una delegación comunitaria, encabezada por el presidente francés, Nicolás Sarkozy, el pasado día 8 en Moscú. Los Veintisiete han decidido que el enviado especial de la UE para la crisis georgiana sea el francés Pierre Morel, de 64 años, que había sido el embajador francés en Rusia y actualmente era el enviado especial de la UE en Asia central.

500 millones de euros

Benita Ferrero-Waldner, comisaria europea de Relaciones Exteriores, presentará hoy ante el Consejo de ministros de la UE su propuesta para destinar 500 millones de euros para la reconstrucción de Georgia tras la guerra del Cáucaso.

En rueda de prensa la comisaria ha explicado que la ayuda será destinada "a cuatro áreas principales: personas desplazadas internamente, rehabilitación y recuperación económica, estabilización macrofinanciera y nuevas infraestructuras", las últimas dedicadas al campo de la energía, ha explicado Ferrero-Waldner.

La UE destina cada año alrededor de 30 millones de euros a Georgia y para este año ya ha comprometido 100 millones de euros hasta finales de año, con la idea de poder asistir al país de manera rápida.