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Serbia aprueba su nueva Constitución con un apoyo de más del 50%

La Carta Magna define a Kosovo como "parte integrante" de Serbia pero con una "autonomía sustancial" dentro del Estado

La nueva Constitución de Serbia, la primera de la era post-Milosevic, ha logrado por escaso margen y tras una tensa jornada de incertidumbre la aprobación popular en el referéndum que se ha celebrado entre el sábado y ayer domingo en este país balcánico. Los primeros resultados de la Comisión Electoral Central (RIK) muestran que según el escrutinio del 10,6% de los sufragios el 51,46% de las personas con derecho a voto ha dado su apoyo a la Constitución.

Para que la nueva Carta Magna pueda ser promulgada por el Parlamento, es necesario el apoyo de más de la mitad del electorado de 6,6 millones de personas, algo que se cumple con los resultados provisionales. Según datos de la RIK, se registró una participación del 53,66% en el referéndum y no se detectaron irregularidades que pudieran influir en el proceso de votación.

Autonomía de Kosovo

La Constitución ya se aprobó por unanimidad en el Parlamento el pasado 30 de septiembre, después de que los partidos gubernamentales y de la oposición alcanzaran un consenso, algo poco habitual en Serbia. Esos partidos aseguraron que el documento, de 206 artículos, ofrece la consolidación de la democracia y del Estado de derecho en Serbia.

El punto principal de la nueva Constitución es Kosovo, definido como "parte integrante" de Serbia, que dispone de una "autonomía sustancial" dentro del Estado, que será precisada con una ley especial. Esta provincia, poblada por una abrumadora mayoría albanesa que aspira a la independencia, está bajo protectorado provisional de la ONU desde el fin de la guerra, en 1999, hasta que se determine su futuro estatuto, posiblemente en los próximos meses.

El primer ministro serbio, Vojislav Kostunica, ha declarado que el visto bueno popular a la nueva Constitución refuerza a Serbia y "protege su integridad". "Esta es una prueba de la fuerza, la madurez y la responsabilidad de Serbia, porque con la Constitución se protege su integridad", ha afirmado Kostunica en rueda de prensa celebrada poco después de conocerse los primeros resultados que confirmaron el apoyo a la Carta Magna.

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Respecto a Kosovo, el primer ministro serbio ha señalado que "al defender Kosovo, defendemos el derecho internacional y si eso se pone en entredicho se producirán muchas consecuencias imprevisibles. No obstante, estoy seguro de que eso no ocurrirá", y añadió que una eventual decisión sobre la independencia de Kosovo sería "un precedente peligroso".

Tras Milosevic

La nueva Carta Magna debería sustituir a la promulgada por el régimen autoritario de Slobodan Milosevic hace 16 años, cuando Serbia todavía era una de las seis repúblicas de la ahora desaparecida federación socialista de Yugoslavia. La elaboración de la nueva Constitución fue una de las principales promesas de los reformistas que en octubre del 2000 desbancaron a Milosevic.

Tras la aprobación de la Constitución, seguirán las elecciones parlamentarias anticipadas, y posiblemente las presidenciales y locales, en fechas aún por determinar.

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