_
_
_
_
_

Uribe asistirá a la cumbre de Unasur en Argentina

El presidente mexicano se ofrece a mediar entre Ecuador y Colombia

El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, confirmó ayer que asistirá a la reunión extraordinaria de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) del próximo día 28 en Bariloche (Argentina), convocada para tratar de limar asperezas tras la crisis desatada por la decisión de Colombia de ceder el uso de siete bases militares a Estados Unidos. Uribe no asistió el pasado lunes a la cumbre de mandatarios suramericanos celebrada en Ecuador por las malas relaciones que mantiene con su presidente, Rafael Correa, lo que obligó a los líderes a convocar una reunión de emergencia en otro país.

Uribe, que viajará a Bariloche con el canciller Jaime Bermúdez, pondrá sobre la mesa tres temas, además del uso de las bases militares: el tráfico ilegal de armas, la carrera armamentista en la región y el terrorismo del narcotráfico. En un comunicado, el presidente colombiano dejó claro que la reunión "no implica condición para el acuerdo entre Colombia y Estados Unidos".

Algunos prevén que Ecuador y Venezuela lleven a la reunión la entrevista que la revista Cambio publicó ayer con el número uno de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Alfonso Cano. Cano fue categórico sobre la entrega de 400.000 dólares a la campaña electoral del presidente de Ecuador, Rafael Correa: "No he entregado dinero a Gobiernos u organizaciones de otros países". Uribe no dio ninguna validez a estas declaraciones: "No se puede convertir a un criminal en legítimo contradictor", dijo el mandatario en una conferencia de prensa con su homólogo mexicano, Felipe Calderón, de visita en Bogotá. Calderón, que respaldó la cesión de bases militares a Estados Unidos, se ofreció para mediar entre Colombia y Ecuador y Venezuela en calidad de presidente temporal del Grupo de Río. "Estamos siempre dispuestos a ayudar por las vías del diálogo, la razón, el entendimiento y el acuerdo a la solución de cualquier controversia en países hermanos, siempre y cuando sea en un marco respetuoso de su soberanía y la disposición de las partes de contar con la participación mexicana", afirmó Calderón.

Acuerdo entre Colombia y EE UU

Mientras tanto, ayer en Washington los negociadores daban las últimas puntadas al acuerdo de cooperación militar entre Colombia y Estados Unidos. "Si Dios quiere, este fin de semana estará todo cerrado", anunció el comandante de las fuerzas militares, el general Freddy Padilla. "Más del 99% está de conformidad", agregó.

Padilla hizo estas declaraciones el miércoles por la tarde en la base de Palanquero, una de las siete que forman parte del acuerdo. Allí, en pleno centro del país, varios generales y el recién nombrado ministro de Defensa Gabriel Silva, se reunieron con los miembros de la comisión de relaciones internacionales del Senado. En Palanquero, EE UU invertirá 46 millones de dólares. Se adecuará para dar cabida a los aviones de inteligencia que operaban en la base de Manta en Ecuador: Orión y Awa. Desde allí se coordinará la lucha antinarcóticos. "No habrá aviones de combate"; "en la tripulación siempre habrá un colombiano"; "no habrá tráfico de tropas norteamericanas por el país", fueron frases del comandante de la fuerza aérea, el general Jorge Ballesteros.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Pero la letra pequeña del acuerdo no se dio a conocer y las dudas persisten. Hay ciertos planes que plantean inquietudes. Apartes conocidos plantean inquietudes. "Tener ejercicios conjuntos para mantener la paz, la seguridad la democracia y la estabilidad, abre muchos interrogantes", advierte el senador liberal Juan Manuel Galán, a quien le preocupan también impresiones como "otras amenazas de carácter transnacional", que se coloca en la lista de objetivos de estas operaciones conjuntas, junto a las de lucha contra el terrorismo y el narcotráfico. "Eso puede ser cualquier cosa", dice el joven senador, quien reconoce que esta ampliación de la cooperación estadounidense es necesaria. Colombia sola, opina, no puede combatir la droga. A otros senadores les inquieta que se haya dejado de lado una verdad como un templo: la lucha antinarcóticos, en la que se han invertido millones de dólares, ha sido un fracaso.

El otro frente que sigue teniendo abierto el presidente Uribe es su posible tercer mandato. Esta semana, el mandatario colombiano ha presionado a los miembros de su bancada para que apoyen el referéndum que facilite su reelección.

Pie de foto: / reuters

El presidente colombiano Álvaro Uribe, en un acto en Bogotá.
El presidente colombiano Álvaro Uribe, en un acto en Bogotá.REUTERS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_