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15 criminales de guerra, en el punto de mira

El Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia, con sede en La Haya, persigue a 15 prófugos, entre ellos Karadzic y Gotovina

A la testigo, ama de casa de 54 años, no le resultó fácil comparecer, contener las lágrimas y recordar las atrocidades que vio, pero quería contemplar la cara de quienes mataron a su marido y asesinaron a amigos y vecinos de su pueblo de forma cruel y gratuita. "Quería preguntarles por qué lo hicieron, por qué destruyeron nuestro pueblo, donde todos éramos buenos vecinos". La testigo no tiene nombre para preservar su seguridad, como otros muchos de los 3.500 que han pasado ya por el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), en La Haya, pero ha contribuido, como los demás, a establecer hechos e identificar culpables de las atrocidades cometidas en aquella guerra. Y gracias a ellos, 161 personas han sido acusadas; de ellas, 116 han pasado ya por el tribunal y 82 han sido condenadas. Ocho serbios y serbio-bosnios procesados se han entregado desde enero.

La UE presiona a los países de los procesados para que los entreguen
La búsqueda de los acusados Karadzic, Gotovina y Mladic es muy intensa
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Han pasado 12 años desde la creación del tribunal, pero la tarea aún no ha sido concluida porque faltan los principales. Son los 15 de la baraja -algunos de los cuales han anunciado su presentación ante el tribunal en los próximos días-, y de ellos, tres acusados estrella: Radovan Karadzic, Ratko Madlic y Ante Gotovina, contra los cuales hay cursadas órdenes internacionales de busca y captura. Los años transcurridos, ¿pueden hacer desistir de la persecución y olvidar? El presidente del tribunal, Theodor Meron, respondió a esta pregunta el pasado 9 de marzo en Sarajevo, con ocasión de la transferencia de la autoridad judicial a la jurisdicción nacional de Bosnia-Herzegovina para que allí también se persigan los crímenes en el ámbito local: "Permítanme decir alto y claro que el tribunal no será cerrado hasta que Karadzic, Mladic y Gotovina hayan sido juzgados".

Algunos de los 15 prófugos pueden estar protegidos por Rusia, e incluso refugiados en lugares desde donde no se les pueda extraditar, pero en el caso de esos tres, la actividad de busca y captura es muy intensa, aunque se enfrente a muchos obstáculos. La UE, presionada por el tribunal, está a su vez presionando a los países de los acusados para que les entreguen, en un intento de atraer la zona oeste de los Balcanes a un acuerdo de asociación y estabilización, como paso previo al inicio de conversaciones de adhesión.

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En el caso de Croacia, patria de Gotovina, donde éste es considerado un héroe, la UE ha suspendido sine die la apertura de conversaciones mientras no le entregue. La fiscal Carla del Ponte cree que el acusado está al alcance de Zagreb. Además, obstaculizan lo que pueden. "Fueron utilizados importantes recursos de los servicios de inteligencia [croatas] para seguir a funcionarios del tribunal y entorpecer la búsqueda de Gotovina", decía en una carta a la UE para pedir que no se iniciasen conversaciones con Croacia. El pasado 23 de marzo, la UE creó una misión que deberá informar si Croacia coopera lo suficiente como para merecer esas conversaciones, y estará integrada por Javier Solana y los países de la troika: Luxemburgo, Austria y ReinoUnido.

Serbia ha recibido últimamente la visita de representantes de la UE, que han advertido de que no se olvidan de Mladic y que se sospecha que está en territorio serbio, lo mismo que Karadzic. Serbia ha anunciado que tiene en estudio un proyecto de ley para bloquear todos los fondos e ingresos a los sospechosos de crímenes de guerra.

Karadzic, Mladic y Gotovina tienen sobre sus espaldas múltiples cargos. Hay una recompensa de casi cuatro millones de euros por la captura de los dos primeros, y de unos 50.000 euros por el tercero, y ésta es su situación procesal:

- Radovan Karadzic (Savnik, Montenegro, 1945). La fiscalía le acusa de genocidio, complicidad para el genocidio, crímenes contra la humanidad (exterminio, asesinato, persecuciones por razones políticas, raciales y religiosas, y actos inhumanos), violaciones de las leyes y usos de la guerra (asesinato, aterrorizar a civiles y toma de rehenes) y violación de la Convención de Ginebra (voluntad de matar). Los hechos que se le imputan se remontan a julio de 1991 y diciembre de 1992, cuando participó en una orgía de sangre para asegurarse el control de zonas de Bosnia-Herzegovina autoproclamadas "República Srpska". El acusado empleó tácticas de terror para forzar a los no-serbios a abandonar esas zonas, utilizando la deportación y la eliminación física. Las fuerzas serbo-bosnias, bajo control de Karadzic, ejecutaron acciones destinadas a reducir significativamente a musulmanes, croatas y demás población no-serbia de Bosnia en determinados municipios, y en particular en Bijeljina, Banja Luka y Srebrenica y alrededores.

- Ratko Mladic (Kalinovik, 1942, Bosnia-Herzegovina). Acusado de genocidio, crímenes contra la humanidad (persecución por razones políticas, raciales y religiosas; exterminio; asesinato, deportación y actos inhumanos) y de violación de las leyes y usos de la guerra (infligir terror a civiles, tratos crueles, ataques a población civil y toma de rehenes). La acusación fiscal mantiene que como comandante en jefe del Ejército serbio-bosnio (VRS) bombardeó, desde mayo de 1992, zonas de Sarajevo, matando y aterrorizando a la población. Sus fuerzas ocuparon pueblos de Bosanski Krajina y del este de Bosnia, deportando a miles de ciudadanos no serbios, muchos de los cuales fueron asesinados o recluidos en campos de prisioneros. De enero a marzo de 1993, sus fuerzas atacaron la zona de Cerska (este de Bosnia-Herzegovina). Miles de musulmanes se vieron obligados a huir a áreas controladas entonces por el Gobierno de Bosnia-Herzegovina, incluidas Srebrenica y Zepa. Más de 7.000 prisioneros bosnio-musulmanes capturados alrededor de Srebrenica fueron ejecutados sumariamente del 13 al 19 de julio de 1995, enterrados en fosas comunes y exhumados después para ocultarlos en otros lugares.

- Ante Gotovina (Zadar, Croacia, 1955). Los cargos: crímenes contra la humanidad (persecución por razones políticas, raciales y religiosas; deportación, y otros actos inhumanos) y violaciones de las leyes y usos de la guerra (saqueo de propiedad pública y privada; destrucción sin freno de ciudades, pueblos y aldeas, y asesinatos). La acusación alega que desde el 4 de agosto de 1995 al 15 de noviembre de 2004, Croacia lanzó una ofensiva militar, Operación Tormenta, para reconquistar la Krajina, en la cual el acusado ejerció de iure y de facto el control de las fuerzas, cuyo fin fue la expulsión de la población serbia. Las fuerzas croatas se apoderaron de ciudades, pueblos y aldeas en el sur de la Krajina, y, cumpliendo órdenes del acusado, perpetraron actos inhumanos, incluido el asesinato de 150 serbios.

La rendición empieza por Borovcanin

Además de los ex jefes político y militar de los serbo-bosnios, Radovan Karadzic y Ratko Mladic, y del croata Ante Gotovina, están los otros 12 prófugos, unos en paradero desconocido y otros a punto de entregarse voluntariamente al tribunal de La Haya.

Estos prófugos son Ljubomir Borovcanin (45 años), Goran Borovnica (40), Vlastimir Dordevic (57), Goran Hadzic (46), Milan Lukic (37), Sredoje Lukic (46, hermano del anterior), Sreten Lukic (50), Nebojsa Pavkovic (59), Vujadin Popovic (48), Zdravko Tolimir (47), Dragan Zelenovic (44), Stojan Zupljanin (52).

Sobre cada uno de ellos, según los casos y grado de culpabilidad, pesa la acusación de complicidad en genocidio, crímenes contra la humanidad (exterminio, asesinato, persecuciones por razones políticas, étnicas y religiosas y actos inhumanos) y violaciones de las leyes y usos de la guerra (asesinatos intencionados, torturas, trato cruel a personas, devastación de poblaciones no justificada por la necesidad militar, destrucción o daño intencionado de instituciones educativas o religiosas, destrucción de propiedad pública o privada, etc.)

Hay cinco o seis de ellos que, según el ministro serbio de Justicia, Zoran Stojkovic, en declaraciones a la prensa serbia, se entregarán al tribunal en los próximos días.

Borovcanin, acusado por su participación en el genocidio de 7.000 musulmanes en Srebrenica en 1995, probablemente se entregará mañana, pero nada hay confirmado.

La próxima semana supuestamente lo harán Hadzic, ex presidente de los serbios de Croacia; los hermanos Lukic (serbo-bosnios), y otros dos más no identificados por el ministro serbio. El general serbio Pavkovic, inculpado por crímenes de guerra en Kosovo, se ha permitido incluso hacer declaraciones a un semanario, Nedeljni Telegraf, anunciando: "De ninguna de las maneras me entregaré voluntariamente".

La apariencia de los 15 o, mejor dicho, de los 14 que aparecen en la foto puede no ser la misma en la actualidad. En el caso de Borovnica, cuyo aspecto se desconoce, la prensa serbia informaba estos días de que ha muerto. La fiscalía de La Haya ha recibido informes contradictorios: un certificado de defunción y seguridad de que está vivo. Hará comprobaciones, según dijo ayer la portavoz de la fiscal Carla del Ponte, Florence Hartmann.

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