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Dimite un ministro francés acusado de agresión sexual a dos empleadas

La salida de Georges Tron es la quinta baja en el Gobierno en menos de un año

El secretario de Estado de la Función Pública francés, Georges Tron, acusado de agresión sexual por dos exempleadas del Ayuntamiento de Draveil (25 kilómetros al sur de París), del que es alcalde, anunció ayer su dimisión como miembro del Gobierno de Nicolas Sarkozy.

El político, con rango de ministro, ha manifestado su voluntad de demostrar su inocencia tras varios días de polémica. Apenas dos semanas después de la detención en Estados Unidos por agresión sexual del director del Fondo Monetario Internacional, Dominique Strauss-Khan, quien se perfilaba como candidato socialista a las presidenciales de 2012 y encabezaba los sondeos, el caso Tron se había convertido en insostenible para el Ejecutivo.

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En una carta remitida al presidente Nicolas Sarkozy, Georges Tron, de 53 años, indica su intención de "defender su inocencia, luchando en contra de las acusaciones vindicativas de dos antiguas colaboradoras". El exministro recuerda que las dos demandantes abandonaron el Ayuntamiento en circunstancias conflictivas. Una de ellas, que dejó el puesto en marzo de 2009, habría desviado dinero público, y a la segunda no se le renovó en septiembre de 2010 debido a un "comportamiento indigno". Según relataba ayer la prensa, se le abrió un expediente disciplinario después de una fiesta celebrada en el Ayuntamiento.

El primer ministro, François Fillon, celebró en un comunicado el "coraje y el sentido de la responsabilidad" de Tron, "quien ha hecho así prevalecer el interés general". "Esta decisión le permitirá ocuparse ahora de su defensa en toda libertad", añade.

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Las dos antiguas empleadas, de 34 y 36 años, presentaron una demanda por acoso sexual el pasado martes y fueron interrogadas el jueves por la policía. Ambas acusan a Tron, adepto a la reflexología podal, de haberles realizado unos masajes en los pies que habrían degenerado en agresión sexual. Los hechos se remontarían a entre 2007 y 2010. El político no ha sido de momento formalmente inculpado.

En un país todavía sacudido por el escándalo de Dominique Strauss-Khan, el caso Tron ha ido creciendo día a día provocando un creciente malestar en el seno del partido en el poder, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), y del propio Gobierno. Ayer por la mañana, el ministro de Asuntos Exteriores, Alain Juppé, invitaba al secretario de Estado a "asumir sus responsabilidades". Pero hasta el último momento, su entorno más directo repetía que el político no pensaba dimitir, salvo que se lo pidiera directamente Sarkozy o Fillon.

Nombrado en marzo de 2010 tras la derrota de la UMP en los comicios regionales, Georges Tron era cercano a Dominique de Villepin, el gran enemigo político de Sarkozy en su propio partido. Sus funciones pasan a ser asumidas por el ministro del Presupuesto y portavoz del Gobierno, François Baroin, por lo que no será sustituido. El exministro mantiene su cargo de alcalde de Draveil, que ocupa desde 1995.

Esta dimisión es la quinta baja en el Gobierno en menos de un año. En julio de 2010, fueron el secretario de Estado para el Gran París, Christian Blanc, y el de Cooperación, Alain Joyandet, quienes se vieron obligados a abandonar sus puestos por utilizar fondos públicos de forma indebida. En noviembre le tocó el turno al ministro de Trabajo, Eric Woerth, salpicado de pleno por el caso Bettencourt por presunto conflicto de intereses. Finalmente, en febrero de este año, la titular de Asuntos Exteriores, Michele Alliot-Marie, tuvo que renunciar tras semanas de polémica por su desastrosa gestión de la crisis tunecina y por sus vacaciones en ese país pagadas por allegados del régimen de Ben Ali.

Georges Tron, el pasado mes de enero en el palacio del Elíseo, en París.
Georges Tron, el pasado mes de enero en el palacio del Elíseo, en París.LIONEL BONAVENTURE (AFP)

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