Un deportista se salva por un desfibrilador municipal
Un desfibrilador salvó ayer la vida de un hombre de 54 años en el polideportivo de La Mina, en Carabanchel. Desde que en junio de 2007 se equiparan los polideportivos de la ciudad con estos aparatos, es la primera vez que se consigue reanimar a un deportista tras una parada cardiorrespiratoria con uno de ellos.
Sobre las ocho de la tarde, A. S. J. acababa su clase de gimnasia cuando se encontró mal y perdió el conocimiento. La enfermera del polideportivo le realizó un masaje cardiaco y abrió la columna de rescate donde se encuentra el desfibrilador (con lo que automáticamente se manda un aviso al Samur). El aparato, semiautomático, detectó una parada cardiorrespiratoria.
Cuando llegó la ambulancia, el paciente ya había recuperado el pulso después de tres descargas del desfibrilador. Los facultativos trasladaron al hombre al hospital Clínico "con un buen pronóstico", según el Samur.