Cambio de ciclo
La incertidumbre está de vuelta en los mercados. La volatilidad ha sido la nota dominante en un ejercicio marcado por la crisis financiera desatada en verano por las hipotecas de alto riesgo, o subprime, en EE UU, que ha seguido haciendo estragos hasta las fiestas navideñas. La Bolsa española ha cerrado en positivo -el Ibex 35 ha subido un 7,32% gracias al empuje de Telefónica-, pero las ganancias son mucho menores que las de los cuatro años anteriores, superiores a dos dígitos.
El nuevo año se presenta, cuando menos, incierto. La falta de liquidez y la desconfianza han encarecido el crédito y ello hace más difíciles las fusiones y adquisiciones de empresas que han impulsado los mercados en los últimos años. Aunque descartan una recesión, los expertos vaticinan que la crisis frenará el crecimiento económico en Europa y EE UU y hará menguar los resultados de las empresas.
El sector más tocado por la crisis es, sin duda, el inmobiliario, que ha tenido un año negro. Valga como ejemplo la caída de casi un 25% y de un 62%, respectivamente, registrada en la última jornada y en la última semana del año por la cotización de Colonial. Hubo un primer aviso a navegantes en abril, cuando una auditoría reveló irregularidades en Astroc, hasta entonces una de las estrellas del parqué. A la vuelta del verano, la crisis subprime y la desaceleración de la demanda han producido un desplome general del sector.
