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La investigación a Intervida

El dinero de los 'padrinos' de Intervida financió empresas endeudadas de la ONG

La fiscalía de Cataluña halla transferencias entre las sociedades, la fundación y cuentas privadas

"Las cuentas claras", promete la página web de Intervida España. Sin embargo, el destino de los 21 euros que aportan todos los meses cada uno de los más de 400.000 socios para apadrinar niños es bastante oscuro. El entramado de empresas creadas en torno a la ONG hace que resulte muy difícil seguir la pista de los fondos.

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"Las cuentas claras", promete la página web de Intervida España. Sin embargo, el destino de los 21 euros que aportan todos los meses cada uno de los más de 400.000 socios para apadrinar niños es bastante oscuro. El entramado de empresas creadas en torno a la ONG hace que resulte muy difícil seguir la pista de los fondos. La Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña investiga a tres personas por un posible desvío de 45 millones de euros a empresas privadas: Eduardo Castellón, fundador en 1993 y primer presidente de Intervida, Rafael Puertas, amigo de Castellón, cofundador y segundo presidente, y Francisca Ruiz, con distintos cargos en las empresas satélites.

No se está investigando al actual presidente, pero, según varios trabajadores de Intervida consultados, esto no tiene nada de particular porque aseguran que la fundación ha sido y es obra y proyecto personal y empresarial de una sola persona: Eduardo Castellón.

¿Cuál es la estructura empresarial de Intervida? Castellón la creó en 1993 como asociación, y pasó a ser fundación un año después. En 2002 se creó Intervida World Alliance (INWA), que aglutina a Intervida España más otras cuatro (en Francia, Italia, Estados Unidos y Japón), encargadas de recaudar fondos en países desarrollados y también a 18 receptoras de ayuda en países en vías de desarrollo (en América Latina, Asia y África). Todas son entidades sin ánimo de lucro. A la vez, de forma paralela a INWA se creó un entramado de empresas, al menos en España y en Perú, que son las que están siendo investigadas por la fiscalía.

Intervida aseguró el martes en un comunicado que la creación de empresas es una actividad habitual en el sector y que "cualquier beneficio que puedan obtener permite dedicar mayores fondos a los fines sociales". Pero lo cierto es que muchas de estas empresas no obtenían ningún beneficio sino que se tragaban los fondos de Intervida, el dinero de los confiados donantes. Algunos ex trabajadores definen estas empresas como "auténticos agujeros negros".

La investigación de la Fiscalía de Cataluña coincide con esta idea. Sobre una de las empresas relacionadas con Intervida indica lo siguiente: "La sociedad Argenta Inmobiliaria SAC está totalmente endeudada [...] El proyecto de creación de viviendas en los terrenos de Rimac (Perú) sólo se puede llevar a efecto si Fundación Privada Intervida anticipa todo el dinero para la construcción". La fiscal señala que las cuantiosas pérdidas de la sociedad parecen "contravenir la idea que han manifestado los sospechosos en sus declaraciones de crear sociedades para el cumplimiento de los fines sociales por menos costo".

En ocasiones, la pista de las transferencias lleva directamente a las cuentas corrientes de trabajadores y cargos de Intervida. La fiscalía señala que cinco sociedades españolas han recibido por lado transferencias de Fundación Privada Intervida y han ingresado después dinero en cuentas de Francisca Ruiz, secretaria de INWA investigada por la Fiscalía y de un técnico de proyectos en Perú de INWA. La mayoría de estas sociedades están ya extinguidas, según datos del Registro Mercantil.

La Fiscalía indica, además que todo este entramado se ha creado al margen de los órganos de gobierno de la Fundación: "De la lectura de las actas de las distintas fundaciones se comprueba que de manera formal por el Patronato en ningún momento se ha estudiado debatido y acordado la creación de todo el complejo empresarial y transmisión de dinero de las fundaciones a esas empresas [...] sino que parece más bien que todo se acuerda y decide en un ámbito diferente al de gobierno de las fundaciones".

Tres empleados de Intervida consultados por este periódico llaman la atención sobre el desconocimiento que tenían de estos hechos algunos directivos de la Fundación en otros países. Las tres fuentes aseguran que un buen número de representantes de Intervida fueron despedidos en 2005 tras enviar una carta a Castellón en la que exigían mayor transparencia en la gestión de la ONG.

Sede de Intervida en Barcelona.
Sede de Intervida en Barcelona.MARCEL·LÍ SÁENZEduardo Castellón.

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