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ZTE y Movistar lanzan una tableta para todos los públicos

ZTE Light Pro funciona con Android y lo tiene en exclusiva la operadora española

La larga espera por las primeras tabletas con Android 3.0, la versión conocida como Honeycomb y la única que Google recomienda como apropiada para tabletas, se está paliando con tabletas como la que acaban de presentar Movistar y el fabricante chino ZTE. La tableta Light Pro, de siete pulgadas, tiene todo lo que se puede esperar de los competidores del iPad que quieren llegar a un público más amplio sin necesidad de rebasar la frontera de los 300 euros. De hecho, el aparato, con Android 2.2, saldrá a un precio entre 119 y 0 euros, según el contrato que se escoja, que será al menos de 18 meses.

Además de la conexión a Internet con operadora la tableta, con cámara de fotos de tres megapíxeles trasera y una frontal, de menos definición para videoconferencia. Pesa 400 gramos y permite escuchar la radio, usar las aplicaciones de posicionamiento a través del GPS asistido, así como ampliar los 512 megas de almacenamiento gracias a su ranura para tarjetas USB.

Una de las diferencias de este terminal es el software. Incluye una aplicación para los aficionados al tenis, más concretamente al Madrid Open que se celebra la próxima semana en Madrid. Las pruebas de uso corrieron a cargo de los jugadores retirados Carlos Moyá y Manolo Santana. Este último, director del torneo, explicó que cada uno de los palcos de la Caja Mágica tendrá una de estas tabletas con toda la información de lo que acontezca en las pistas. "Soy un chalado de los cacharros, así que me haré con una pronto", añadió.

Uno de los puntos críticos de estos aparatos suele ser la actualización del sistema operativo. Tanto ZTE como Movistar se comprometieron a ofrecer, sin necesidad de usar el ordenador, de parches y mejoras mensuales. El aparato promete una autonomía en espera de 20 días y cinco horas y media de uso continuo.

Por otra parte, el fabricante Huawei ha demandado a ZTE por la violación de patentes y marcas registradas en Alemania, Francia y Hungría. La demanda se basa en que ZTE está violando una serie de patentes de tecnologías de tarjetas de datos de Huawei, así como a que ha utilizado ilegalmente una marca registrada de Huawei sobre algunos de sus productos de tarjetas de datos.

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