Labios rojos y dinero
Málaga se llenó ayer de lenguas y labios rojos: en las camisetas, en las gorras, tatuados en los ombligos. Mientras a lo largo de la costa saltaban barquitas con imágenes blancas de la Virgen del Carmen, patrona marinera, en el Puerto de la ciudad casi sesenta mil personas esperaban a sus satánicas majestades cubiertos de labios lascivos. Toda Málaga ayer eran lenguas y labios rojos o dorados diseñados por Andy Warhol. Labios-fruta venidos de todos los lugares en aviones desde Inglaterra, en trenes desde toda España, en autobuses, en automóviles, en bicicleta.Tantos labios dan dinero, mucho dinero. Los Rolling son una franquicia segura: musical sobre el escenario y en los discos, comercial en el derredor de productos que les acompañan. En el interior del recinto portuario cuatro puntos de venta despliegan el merchandising que genera el supergrupo: camisetas, sudaderas, camisas vaqueras, cazadoras, gorras, fotografías, posters, pins, litografías enmarcadas, almohadillas de labios, vasos de plástico con pajita. Una camiseta con el león asirio puesto en pie, imagen promocional del disco y de la gira mundial de Bridges to Babylon, cuesta entre cinco y seis mil pesetas según modelo en la venta oficial.
En la venta pirata, chavales que sacan de sus mochilas diez o veinte camisetas, la cosa baja a mil quinientas. Pero ayer duró muy poco la venta pirata. Los Rolling no permiten que ninguna rémora se beneficio del crédito de su ecosistema. Apenas duró hora y media la venta clandestina dentro y fuera del recinto.
Ilegal
Lo ilegal es lo que no tiene el poder, claro. Ni el chaval de las veinte camisetas, ni tantos otros chiringuiteros ambulantes de la zona que aspiraban a vender su bocadillo pudieron ayer beneficiarse de las migajas del circo del rock. Cada suite alquilada por los Rolling en el Hotel Byblos vale 190.000 pesetas al día. "Un permiso de venta ambulante vale quince duros por metro", asegura Manuel desde su carro de chucherías y bebidas, "lo malo es que el Ayuntamiento no te lo da". Los Policías municipales mandan cerrar quioscos. Pero no es tan grave. Manuel asegura que luego aflojarán la vigilancia. "Ellos son de aquí y saben cómo vivimos, estos extranjeros vienen y se llevan los millones, algo tendremos que ganar nostros que pagamos para que toquen, ¿o no?"Los Rolling son una franquicia. Sobre el escenario y en los discos son una máquina de hacer música. Aparte de todo eso son una máquina perfecta de hacer dinero.
Una litografía oficial cuesta 33.000 pesetas, una camiseta del equipo virtual de los Stones,. 14.000, una camisa vaquera 13.000, una cazadora 42.000 pesetas. Una botella de agua de 33 centilitros en el recinto, 300 pesetas. En el bar de la esquina 50 pesetas. Sólo los labios de Warhol no tenían sed. Siempre lascivos, enrojecidos con la lengua fresca satisfecha de ser una rentable marca registrada.
