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Reportaje:MÚSICA

El islam de Youssou N'Dour

Siempre quise grabar este disco porque tenía en la memoria los cantos de Oum Kalsoum que me emocionaban de niño", cuenta. Su padre sintonizaba en la radio los conciertos de la diva. La música clásica de Egipto ha sido una referencia para el mundo árabe y en muchos lugares de África. "También quería hablar del islam en Senegal, con sus cofradías y sus peculiaridades. Esas dos ideas me han llevado a hacer un disco panafricano".

Youssou N'Dour (Dakar, 1959), avalado por Peter Gabriel en sus primeros pasos internacionales, se hizo muy popular al grabar Seven seconds con Neneh Cherry en 1994. Para este disco olvidó a sus compañeros de la Super Étoile de Dakar, que le han acompañado en los últimos veinte años, y recurrió al compositor y arreglista egipcio Fathy Salama. "Lo conocí a través de un amigo que tenía muchos contactos en Egipto. Cuando hablamos, todo fue sobre ruedas. Me impresionó su cultura y su visión de las cosas".

No tuvo problemas con los cuartos de tono. Y las percusiones orientales y las cuerdas de una orquesta árabe clásica casan de maravilla con los ritmos senegaleses. Cinco años ha tardado en poner el disco en circulación. Hay que decir que se grabó en 1999. Hubo un intento de la discográfica para editarlo tras el 11-S. "No quise que saliera entonces porque no quería entrar en el debate político. Creo que la gente no lo hubiera entendido si llega a salir justo después de esos atentados, que yo condeno".

Con portada blanca y letras árabes doradas, Egypt rechaza la idea de islam igual a fanatismo. La de una religión que empuja a las personas a matar y a suicidarse. "Siempre es una minoría la que utiliza la religión, cualquier religión, para sus planes extremistas, pero la musulmana es una religión de paz, amor, tolerancia...", afirma.

Vestido de blanco, lo presentó el 29 de mayo en el escenario de Bab Makina, en el Festival de Música Sacra de Fez, al frente de 22 músicos -quince egipcios y siete senegaleses-. "Me sentí liberado después de ese concierto. Hacía mucho que no tenía el canguelo y ese día sí. Creo que la belleza de la Ciudad Santa y los aplausos del público han bendecido el disco".

En Senegal -donde la mayoría de la población profesa la fe musulmana- el disco se titula Sant Allah, o sea, "gracias a Dios". La decisión del cambio a Egypt para otros países la habría tomado el propio Youssou N'Dour por delicadeza hacia otras creencias. "En un primer momento los senegaleses lo recibieron con algo de inquietud. Lógico porque no era el Youssou N'Dour tradicional. Les ha tomado algún tiempo, pero creo que empiezan a apreciar su sinceridad y ahora lo oigo un poco por todas partes".

"La diferencia del islam en Senegal es que se formaron hermandades que rechazaron que los colonizadores impusieran otra religión. Aunque esos guías ya se hayan ido, ahora sus hijos y nietos los representan y guardan la calidez y el contenido de sus mensajes". Youssou N'Dour pertenece a la de los murides cuyo guía, Cheikh Amadú Bamba (1855-1927), fundó la ciudad de Touba y fue deportado por los franceses. Le canta en Shukran Bamba. "Unió religión y cultura senegalesa en una iniciativa un poco más local. Las otras cofradías son prolongaciones de algo que partió del Magreb o La Meca". Mahdiyu Laye está dedicada a un enviado del profeta y Cheikh Ibra Fall recuerda al fundador del movimiento Baye Fall, a cuyos seguidores se reconoce por las trenzas rastas y al que pertenece el músico Cheikh Lô.

Le gusta acudir a la mezqui-

ta de Daru Salaam, cerca de la ciudad sagrada de Touba. "Prefiero aquellos días en que va menos gente para acudir tranquilamente como un simple discípulo, que es como debe de ser". Difícil pasar inadvertido para quien es más popular que el presidente del país.

Youssou N'Dour fue de los primeros africanos que decidió invertir sus ganancias en su país para crear empleo. Ahora tiene en Dakar una emisora de radio, una compañía de discos, una empresa de Internet, un club y una revista. Más de cien personas trabajan para él y entrega un porcentaje de sus beneficios a la Fundación Youssou N'Dour que lucha contra el sida y la malaria.

El año pasado anuló una gira de dos meses por Estados Unidos -la mayor de su carrera- como protesta por el modo en que Bush y otros se saltaron a las Naciones Unidas. "Los promotores, que habían perdido mucho dinero y energía, me contactaron de nuevo para volver en julio. No es que la situación sea feliz, y no estoy de acuerdo con el sistema, pero también pienso en las personas a las que les gusta mi música. Por desgracia, los que estábamos en contra de la guerra en Irak teníamos razón".

El músico senegalés Youssou N'Dour.
El músico senegalés Youssou N'Dour.

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