Las localidades de interior acaparan la pérdida de gente
Las pequeñas localidades cada vez son más pequeñas y las de tamaño medio crecen a un ritmo imparable. La población valenciana es eminentemente urbana. Un 44,8% reside en municipios de más de 50.000 habitantes. De los 542 municipios valencianos, los 71 que se sitúan por encima de los 15.000 habitantes aglutinan a las tres cuartas partes de la población total, es decir un 75,85%.
Los últimos datos del INE confirman que los pequeños núcleos urbanos de las comarcas del interior están perdiendo habitantes. La población que más ha decrecido es Sacañet, en la comarca del Alto Palancia, que ha perdido en un año el 21% de su población, de 147 a 116 habitantes, al igual que Herbés, (Els Ports) que pierde un 13,10% de 84 a 73 censados y Terrateig (Vall d'Albaida) decrece un 11,45% y pasa de 393 a 348 personas. Venta del Moro, próxima a la zona de Utiel-Requena, también registra un descenso de su población, al pasar de 1.493 habitantes a 1.413, un 5,36% menos. Otras poblaciones del interior de Castellón pierden habitantes, como Càlig (Baix Maestrat), con un -4,30%, Artana (Plana Baixa), un 2,59% menos, Chera (La Plana de Utiel Requena) decrece un 4,95% y Titaguas, en la serranía del Turia, pierde un 4,4% de su gente.
El interior de la provincia de Alicante es otra de las zonas en la que las pequeñas localidades observan cómo los jóvenes emigran y los ancianos fallecen. Así es el caso de Fageca y Confrides que han perdido, respectivamente, en el último año un 4,8% y 4,98% de su población censada. También pierde un 3,8% de sus habitantes Famorca, Agres un 2,68%, Benimarfull un 3,08% y Benassau un 6,33%. En Valencia la localidad de Dos Aguas pasa de 441 habitantes a 406, lo que significa un decrecimiento del 7,94% en un solo año.
