El Vaticano deniega el último recurso sobre el arte de la Franja
El Tribunal de la Signatura Apostólica del Vaticano ha denegado el último recurso interpuesto por el Obispado de Lleida para paralizar la devolución de las obras de arte sacro que reclama la diócesis de Barbastro-Monzón. Dicho recurso solicitaba una reforma del Decreto del 27 de septiembre de 2005, por el que el Vaticano ordenaba a la diócesis de Lleida a devolver a la aragonesa de Barbastro-Monzón 113 obras de arte que están en el Museo Diocesano de Lleida y que procedían de parroquias oscenses segregadas de la diócesis catalana a partir de 1995. Entre las obras reclamadas destacan piezas y tallas religiosas de los siglos XII y XIII, como el frontal de Treserras y la arqueta de Buira.
El representante de los servicios jurídicos del Obispado de Lleida, mosén Josep Casanova, afirmó ayer que ese decreto "no es ejecutable en el Estado español" y recordó que continúa abierta la vía del tribunal de la Rota de Roma, que dirime sobre las cuestiones civiles de la Iglesia, y en la que el Obispado de Lleida espera obtener una resolución favorable. Por su parte, el alcalde de la ciudad, Ángel Ros, afirmó: "sí que es un revés en lo referente a la vía administrativa pero se ha de recordar que la última palabra la tendrá el Tribunal de la Rota". En su opinión, "se demostrará la propiedad de las piezas, que es lo que vale por encima de todo". Asimismo, el presidente de la Diputación, Isidre Gavín, aseguró que la corporación "ha trabajado siempre para garantizar la unidad de la colección y eso seguiremos haciendo".
"¿Por qué no es ejecutable un decreto de la Signatura en España cuando hay un concordato que así lo dispone? ¿Y por qué recusaron nada menos que al cardenal prefecto de la Signatura como poco fiable? Pienso que para ganar tiempo", respondió también ayer el vicario judicial de la Diócesis de Barbastro-Monzón, José Mora, para quien la resolución del tribunal del Vaticano supone que "ya no hay más caminos" para nuevos recursos que impidan el cumplimiento de la resolución.
Para el portavoz judicial de la diócesis altoaragonesa, la demanda ante el Tribunal de la Rota es sólo "una forma más de ganar tiempo".
