El FBI investiga si hubo fraude en las hipotecas de Countrywide
Countrywide es uno de los nombres propios de la crisis hipotecaria que estalló el pasado verano en EE UU y cuya onda expansiva aún agita al sistema financiero internacional. Hasta la crisis, era la mayor entidad hipotecaria privada de EE UU, un liderazgo cimentado en la concesión de hipotecas de alto riesgo. Ahora, tras el desplome de su cotización bursátil, está bajo la lupa de los investigadores del FBI, que buscan indicios de prácticas fraudulentas en su gestión.
Según reveló ayer The Wall Street Journal en su edición electrónica, el FBI investiga si los directivos de Countrywide sabían que el riesgo de impago de sus hipotecas era mayor del que admitían. Y también comprueba el sistema creado por la hipotecaria, varios bancos de inversión y las agencias de calificación para integrar títulos de deuda respaldados por esas hipotecas con otros activos más seguros y crear así productos financieros atractivos para el mercado. Countrywide, que perdió 275 millones de euros sólo en el último trimestre de 2007 y está en proceso de venta a Bank of America, emitió más de 65.000 millones de euros en títulos de deuda respaldados con los ingresos de las hipotecas entre 2004 y 2007.
