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La comisaría de Ondarroa volverá a estar a pleno rendimiento en cinco meses

El edificio de la comisaría de la Ertzaintza en Ondarroa, que resultó muy afectado por el coche bomba que ETA colocó el pasado 21 de septiembre, quedará plenamente reparado en cinco meses, según informó ayer Interior. Las obras de reparación de la comisaría, devastada por la explosión de 100 kilos de amonal, supondrán una inversión superior a 1,6 millones de euros.

Interior tiene previsto aprovechar la obra para incluir también nuevos elementos físicos de refuerzo que mejoren la seguridad del inmueble. Con todo, los servicios policiales, que no han dejado de prestarse desde el atentado, continuarán realizándose en su totalidad desde otras dependencias de la Ertzaintza. Esta comisaría ha "llevado a cabo el servicio normal" y durante las primeras semanas habilitó varias furgonetas para recoger las "más de quinientas" reclamaciones presentadas por los afectados por el atentado, según explica el propio jefe de la comisaría en una entrevista en el último número de Ertzaintza Gaur, la publicación interna del departamento.

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Interior quiere aumentar el número de agentes que trabaja en dicha comisaría. Ha asignado 30 nuevas plazas en el último mes, duplicando el número de bajas (15 en total) que causó el atentado por lesiones físicas o psíquicas. Para cubrir esas plazas "no ha habido el más mínimo problema", ya que se han presentado como voluntarios un total de 191 agentes procedentes de otros destinos, aseguró el departamento.

Jura de la Constitución

El consejero de Interior, Javier Balza, reiteró ayer en la Cámara de Vitoria a preguntas del parlamentario del PP Carlos Urquijo que la Ertzaintza ya ha modificado la fórmula de toma de posesión de la condición de ertzainas, anulada por el Supremo.

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El alto tribunal señaló el pasado 30 de septiembre en un fallo que "es obligado que los agentes realicen la jura o promesa de la Constitución de manera individual para adquirir la condición plena de funcionarios", recordó Urquijo. Y añadió que 7.449 ertzainas (el 94% de la plantilla), es decir, los que se graduaron antes de la 16ª promoción, no lo habrían cumplido.

Balza afeó a Urquijo su "poca vergüenza" por subirse a la tribuna "sin haberse leído la sentencia". El consejero recalcó que el fallo señala expresamente que "no tiene efecto retroactivo". Por tanto, no hay que adoptar ninguna medida sobre los agentes anteriores a la 17ª promoción. Lo que no aclaró Balza fue la otra cuestión planteada por Urquijo: ¿qué fórmula ha usado la Ertzaintza en las últimas promociones para cumplir la legalidad?

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