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Crisis mundial

Sarkozy no convence a Merkel para que aporte más dinero al plan de la UE

Los Estados europeos abordan medidas dispares para afrontar la recesión

Andreu Missé

El trabajo de la Comisión Europea para coordinar las estrategias de los países de la Unión para afrontar la crisis se presenta cada vez más difícil y complejo. Los grandes Estados de la Unión están adoptando medidas completamente dispares. Así, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, no logró convencer ayer a la canciller alemana, Angela Merkel, para que el plan de estímulo económico que prepara Bruselas supere el 1% del PIB comunitario, unos 130.000 millones de euros. Por otra parte, ambos mandatarios rechazaron generalizar la medida de rebajar 2,5 puntos el IVA, la medida más emblemática del Gobierno británico de Gordon Brown.

Sarkozy y Merkel analizaron sus respectivas estrategias ante la crisis en el marco del X Consejo de Ministros franco-alemán celebrado ayer en París. El presidente francés se ha convertido en el principal valedor del paquete de estímulo fiscal que prepara la CE, que será presentado mañana por su presidente, José Manuel Durão Barroso. El propio Sarkozy reconoció que la actitud de ambos países sobre las medidas de Bruselas es muy distinta: "Francia trabaja sobre ello y Alemania reflexiona", dijo el presidente francés.

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La propuesta de la Comisión es presentar un plan que coordine los distintos planes que están elaborando los Estados miembros y animar a que hagan lo mismo los que no lo han hecho todavía. Aunque Berlín ya ha advertido de que el conjunto de estos planes no debe superar el 1% del PIB comunitario (130.000 euros), Barroso confía aún elevar esta cuantía.

Merkel acepta la coordinación de medidas pero se muestra muy cautelosa por temor a que "los acontecimientos se precipiten". La canciller advirtió de que "corremos el riesgo de confundir actuación con precipitación". Sin embargo, "la prudencia de Merkel contrasta con la posición que defendió en la reunión del G-20 el pasado día 15 en Washington", señala una fuente comunitaria. "En aquella reunión", añade, "ella fue la que más insistió en que los grandes países emergentes, como China, desarrollaran también planes de estímulo para sus economías, porque ello redundaría en beneficio de las exportaciones alemanas". En lo que sí estuvieron de acuerdo Merkel y Sarkozy, aunque sin concreciones, fue en apoyar la industria del automóvil. "Nuestra determinación para ayudar a la industria, y especialmente a la del automóvil, es total, y éste es un punto en el que estamos de acuerdo completamente". Pero también aquí habrá diferencias.

El plan que presentará Barroso mañana contiene medidas específicas para reactivar la economía. Su principal palanca es la agilización de los trámites y los anticipos de los Fondos Estructurales y de Cohesión. Con este objetivo se modificarán los reglamentos de estos fondos para que en 2009 los 15 antiguos Estados miembros puedan recibir, igual que los nuevos, anticipos del 2% del total de los proyectos, como ya hicieron en 2007 y 2008. El volumen total de estos fondos es de unos 347.000 millones para el conjunto de la UE y de 35.000 millones para España.

Merkel (izquierda) conversa con Sarkozy en una calle de París cuando se dirigían a un almuerzo en casa de Carla Bruni, esposa del presidente francés.
Merkel (izquierda) conversa con Sarkozy en una calle de París cuando se dirigían a un almuerzo en casa de Carla Bruni, esposa del presidente francés.AP

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