"Hay que sacar el lado ñoño que llevamos dentro"
Se define como una "chica pop", presume de que le gusta el producto nacional ("es decir, chupa-chups, sugus y lacasitos"), se pone a cada rato unas gafitas con forma de corazón y elige los vestidos de más colorinchis disponibles. María Zahara Gordillo (Úbeda, 1984), jienense pizpireta y dicharachera, encarna el espíritu de la felicidad sin paliativos. Lo corrobora un debut discográfico de título imposible y sabor a helado de fresa: La fabulosa historia de la chica que perdió el avión.
Le cambió la vida el mismo día que descubrió MySpace. Cuelga las canciones y gestiona sus listas de contactos personalmente; le han salido admiradores en Canadá, Rusia "y dos en China", y responde al día un centenar de correos y comentarios. A fuerza de propagar su música al ritmo de una (dulce) pandemia, una de sus composiciones más pegadizas, Merezco, será la sintonía de la próxima Vuelta.
"Me siento en permanente regresión a la infancia"
Pregunta. "Me lo merezco por tonta". ¿No se lo pone muy fácil a ex novios y demás detractores?
Respuesta. Totalmente, pero reírme de mí misma es el primer artículo en mi declaración de principios. Parafraseando a Homer Simpson, tengo la sensación de no haber aprendido nada de nada.
P. Ajá. Lo que se entiende por una chica calamitosa.
R. Procuro organizarme la rutina y me cuesta delegar, pero... el armario lo sigo teniendo hecho un desastre. ¡Que le pregunten a mi novio!
P. ¿El chico fabuloso de la canción?
R. Ése, ése: Sergio. Un científico loco del CSIC. Firmaba donde fuera para que pase conmigo toda la vida. Suena muy pastel, pero la gente se ríe con mis canciones y saca el lado ñoño que todos llevamos dentro. No tiene nada de malo. Yo juego a ello: me siento en permanente regresión a la infancia, en una fiesta de cumpleaños que dura siempre.
P. ¿Cómo se las apaña para ser feliz?
R. Mi familia me enseñó que las cosas cuestan, pero con una sonrisa cuestan menos. Es mejor levantarse con un "buenos días" que con un gruñido.
P. ¿Usted es más de bici o de Ford Fiesta?
R. ¡De bici! No tengo ni carné, me da pánico. Cuando vivía en Granada iba con una bicicleta rosa con cestita, como la de Phoebe en Friends. Lástima que me pegara un castañazo con ella en pleno barrio de El Realejo...
P. Por cierto, ¿qué panzada televisiva se pegará en casa cuando acabe todo este ajetreo?
R. Quizá opte por despanzurrarme en el sofá y quedarme varios días en silencio, mirando por la ventana y con la babilla cayéndome... Pero si enchufo el DVD será para regalarme una buena dosis de The Office. Hasta aquí van a llegar las carcajadas.
