Barajas vuelve a la actividad de un festivo
Tres días después del plante de controladores que estranguló súbitamente su actividad durante más de 24 horas, el aeropuerto de Barajas recuperó ayer el pulso habitual de un festivo cualquiera. En un comunicado referido al trasiego de vuelos en toda su red de aeropuertos, AENA calificó el día de ayer como una "jornada normal".
Los 1.102 vuelos programados en Madrid se desarrollaron sin prácticamente incidencias, salvo algunos retrasos ocasionados por los reajustes de programación que siguen efectuando las compañías para reubicar viajeros y al mal tiempo que afecta a varios países europeos. Anoche, el número de vuelos cancelados era inferior a la veintena.
Las filas de viajeros en los mostradores de atención al cliente de las aerolíneas disminuyeron ayer sustancialmente, pero aún quedan personas afectadas, bien por las cancelaciones del fin de semana o porque han perdido sus conexiones al llegar con demora a Barajas.
Los pasajeros en tránsito que tendrían que haber aterrizado en los últimos tres días son los que ayer sufrieron los mayores problemas en el aeropuerto madrileño para poder volar, dado que muchas de las rutas, principalmente las transatlánticas, estaban llenas.
En lo que respecta a la actividad de los controladores aéreos, supervisada desde el pasado fin de semana por la autoridad militar, AENA informó ayer de que todos los profesionales que trabajan en el Centro de Control de Torrejón de Ardoz acudieron puntualmente a su puesto.
