Resiste y vencerás
Incluso los que más conocían a Francisco Camps pensaban que en algún momento de este larguísimo proceso se rendiría y dimitiría. Hasta Mariano Rajoy, aseguran, que ha decidido no echarlo, siempre confió en que se marchara él solo con la presión, como sucedió con el ex tesorero Luis Bárcenas. Pero ya nadie sueña con eso. Camps parece dispuesto a resistir.
En la calle de Génova, el valenciano ha perdido todos los apoyos. Están hartos de sus formas. Del mundo paralelo en el que pretende vivir, dicen, como si no pasara nada. De su insistencia en que le nombren candidato. Digan lo que digan los valencianos, sigue sin haber fecha. Solo puede hacerlo el Comité Electoral, y no está convocado. Están cansados de su obsesión por los baños de masas, por forzar una ficticia imagen de apoyo.
Prácticamente todo el mundo prefiere otro candidato. Se habla de Alberto Fabra, alcalde de Castellón. Y se analiza en Génova la necesidad de darle la vuelta al PP valenciano, un partido corroído por los escándalos de corrupción y a la espera de un proceso por financiación ilegal que tarde o temprano llegará.
Pero nada se moverá hasta que Rajoy dé la orden de echar a Camps. Y nadie cree a estas alturas que la vaya a dar. Le debe mucho por su apoyo pasado, explican, no tiene presión porque las encuestas van bien en Valencia y no es fácil echar a alguien con tanto poder como un presidente autonómico. Rajoy parece decidido a dejar pasar el tiempo, una vez más. Camps le conoce bien, y está demostrando que puede ganarle precisamente con la estrategia que al líder mejor se le da: resiste y vencerás.
