Urkullu llama rémoras a PSE y PP por retrasar la fusión
El presidente del EBB del PNV, Íñigo Urkullu, mostró ayer su satisfacción por el acuerdo alcanzado para la fusión de las cajas vascas y que, según dice en su blog, ha sido posible tras superar "las rémoras" que han supuesto para ese proyecto el PP-PSE por una parte y la izquierda abertzale por otra.
A su juicio, el acuerdo de fusión tiene un doble valor porque gracias al carácter político de la gestión, las cajas vascas han llegado a este momento ocupando los primeros puestos de solvencia de las entidades financieras del Estado y superando con nota todas las pruebas de esfuerzo a las que han sido sometidas.
"Ahora que, con tanta ligereza se cuestiona el entramado institucional vasco", dice Urkullu, es muy importante destacar que este sistema, ha funcionado bien y ha ofrecido a la sociedad unos resultados acreditados superiores a los de su entorno, "también en el ámbito financiero".
Urkullu tuvo unas palabras de agradecimiento a los muñidores del primer acuerdo de 2005, en concreto a los expresidentes de las tres cajas, Xabier de Irala de la BBK, Carlos Etxepare de la Kutxa y Gregorio Rojo de la Vital.
Pero a partir de ahí reconoció el trabajo de su propio partido. "Un país solo puede avanzar si cuenta y está impulsado por un proyecto político de calado. Desde hace dos décadas el PNV ha defendido este proyecto de integración de las Cajas vascas, pero es evidente que no ha resultado fácil avanzar y alcanzar un acuerdo", añadió.
En su opinión el pacto de todas las fuerzas políticas acerca a los vascos a un nuevo tiempo. "La integración de las cajas se ha convertido en la alegoría del futuro de Euskadi. Es posible un acuerdo de futuro".
