_
_
_
_
_

El tribunal del 'caso Marta' estudia las alegaciones planteadas por las partes

La vista se reanuda hoy con las escuchas y el testimonio de los adultos acusados

Cuando el invierno de 2009 la desaparición de la joven sevillana Marta del Castillo conmocionó a la opinión pública, Miguel Carcaño, Samuel Benítez y Javier García eran dos adolescentes de 19 años y un menor de 15. Los tres mantenían una amistad tan estrecha que habían sido capaces de acabar supuestamente con la vida de la joven (Carcaño en solitario o con la ayuda del menor, según las versiones), ayudar al asesino a esconder su cuerpo y fingir durante tres semanas que la buscaban. Casi tres años después del crimen, nada queda de aquella amistad y Miguel Carcaño y Samuel Benítez son dos adultos capaces de cruzarse en un pasillo sin intercambiar una mirada.

La Audiencia de Sevilla acogió ayer la primera sesión del juicio a los cuatro adultos acusados por la violación, muerte y desaparición de Marta, cuyo cuerpo todavía no ha sido hallado. Benítez se sentó delante, compartiendo banco con los también acusados Javier Delgado, hermano de Carcaño, y María García, la novia de Delgado. Detrás, Carcaño, el asesino confeso, escoltado por dos policías después de su traslado desde prisión, y para el que el fiscal pide 52 años de cárcel. No se miraron, no intercambiaron ni un saludo ni un reproche.

La familia de la joven expone que habría que juzgar juntos al menor y los adultos
Más información
La Audiencia de Sevilla se blinda para el 'caso Marta'
Fuerte despliegue policial y gran expectación mediática

Tras una procelosa instrucción, ayer se iniciaron las 20 sesiones en las que 90 testigos y 15 peritos declararán ante el tribunal. El juicio está marcado por la sentencia absolutoria que un juez de menores dictaminó sobre Javier G. El Cuco, al que absolvió de asesinato y violación y que supone la espina dorsal del escrito de acusación de la fiscalía y la particular, ejercida por la familia de la víctima. Hoy y mañana es el turno de los cuatro imputados.

Ayer la primera sesión del juicio fue breve y se prolongó solo dos horas. Las partes expusieron al tribunal las cuestiones previas, y este suspendió la vista oral para estudiarlas hasta hoy. Los escritos de la acusación particular y la fiscalía abrieron la sesión. Ambas partes coincidieron en recordar que los cuatro acusados han impedido encontrar el cuerpo de la joven sevillana. Fueron dos relatos coincidentes al condensar el sórdido crimen protagonizado presuntamente por Carcaño y El Cuco.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La defensa de la familia de Marta planteó a los magistrados que estudien elevar al Tribunal Constitucional una cuestión de inconstitucionalidad de la Ley del Menor al haber provocado dos juicios paralelos para un mismo crimen: uno para el entonces menor El Cuco y otro para los cuatro adultos. "No será testigo ni imputado... ¿Qué es el menor en este proceso?", interrogó el abogado José María Calero. Este pidió asimismo la declaración de los padres de Benítez y del comisario que dirigió las investigaciones, Manuel Piedrabuena.

Mientras, la defensa de Javier Delgado, acusado de encubrir el crimen, afirmó que las escuchas de las llamadas telefónicas, que se oirán hoy en el juicio, son ilegales porque no respetaron las garantías jurídicas. La fiscalía discrepó porque los pinchazos "no vulneran derecho alguno". Además, el abogado de Delgado solicitó que se declare nulo el procesamiento de su cliente porque solo se apoya en el testimonio de El Cuco. "Sin ningún otro indicio que lo sustente (...) Ni siquiera debe pasar por la pena de banquillo", se quejó.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_