El Supremo ilegaliza Batasuna para "proteger la democracia"
HB-EH-Batasuna deberá cesar de inmediato en todas sus actividades
El Tribunal Supremo ha notificado hoy la sentencia de ilegalización de Batasuna a las partes implicadas, con lo que el fallo se hace efectivo. El texto explica que se ordena la ilegalización y disolución de HB-EH-Batasuna porque "el beneficio que se obtiene es una inmediata protección de la democracia y de los derechos de los demás".
El Supremo destaca en la justificación de las medidas adoptadas que los tres partidos ilegalizados forman parte de una estrategia común con ETA. La sentencia defiende la ilegalidad de Batasuna, entre otros motivos, por "las frecuentes llamadas a la violencia" realizadas por estos partidos, tanto en documentos internos como en actos externos. "La defensa de los derechos fundamentales exige la declaración de ilegalidad y disolución", dice la sentencia.
En este sentido, subraya que la gravedad de los actos terroristas hace que la medida no sea desproporcionada: "En vista de la gravedad de los actos de terrorismo en nuestro país, en los que cerca de mil muertos son imputables a la banda terrorista, entre los que se encuentran hombres, mujeres y niños, hace que la medida no albergue reproche alguno en cuanto a la proporcionalidad", explica el Supremo.
La sentencia, de 253 folios, ha sido notificada a la Fiscalía, al Abogado del Estado y al procurador de la formación política ilegalizada. El fallo ordena la cancelación de las inscripciones en el registro de partidos políticos de Batasuna y también de Euskal Herritarrok (EH) y Herri Batasuna (HB) -siglas utilizadas en el pasado por la misma formación-. Además, la sentencia indica que HB-EH-Batasuna deberán cesar de inmediato en todas sus actividades. También pone en marcha un proceso de liquidación patrimonial que será controlado por tres interventores designados por el Tribunal.
Cese de actividades
Aunque la notificación supone la entrada en vigor de la sentencia, en cualquier caso Batasuna no tiene formalmente actividad como partido político después de que el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón acordara el pasado 26 de agosto la suspensión cautelar de sus actividades por un periodo de tres años en relación con el proceso penal que se sigue contra el entramado de ETA.
El fallo fue acordado por unanimidad el pasado día 17. Los 16 magistrados que componen la Sala Especial del Supremo consideraron que esta formación ha vulnerado la ley de partidos. La decisión del Supremo se produjo después de que el Tribunal Constitucional avalara la constitucionalidad de la Ley de Partidos Políticos y estableciera que no es una norma sancionadora, ni singular, porque no se ha dictado para ilegalizar a un determinado partido, ni restringe derechos fundamentales.
"Alivio para la democracia"
Las reacciones políticas a la sentencia no se han hecho esperar. El presidente del PP en el País Vasco, Carlos Iturgaiz, ha exigido al presidente del Parlamento de Vitoria, Juan María Atutxa, que disuelva el grupo Sozialista Abertzaleak. Iturgaiz también ha señalado que esta sentencia supone un "alivio para la democracia" y un "triunfo del Estado de Derecho". También ha asegurado que la sentencia evidencia que ETA y Batasuna son lo mismo "por mucho que quieran cambiar de nombre".
Mientras, el PSOE ha expresado por boca de su portavoz en el Congreso, Jesús Caldera, su "satisfacción" ante el hecho de que la sentencia de ilegalización de Batasuna dé "la razón" a la decisión que adoptó el Parlamento para que dicha organización fuera declarada ilegal.
Por su parte, el portavoz de Sozialista Abertzaleak, Arnaldo Otegi, ha arremetido contra la decisión del Supremo y ha asegurado que la ilegalización de Batasuna es una "declaración de guerra" del "aznarismo". En los pasillos del Parlamento de Vitoria Otegi ha pedido la elaboración de una ley de partidos vasca.
