Detenidos en Navarra dos supuestos 'liberados' de ETA con 150 kilos de explosivo
Los arrestados ultimaban un atentado
La policía ha detenido en las últimas horas a dos supuestos liberados (a sueldo) de ETA en un domicilio de la calle Lekoartea, en la localidad navarra de Berriozar. Los arrestados son Joseba Segurola Beobide, de 24 años, e Ibai Aguinaga Guinea, de 22, ambos con antecedentes de detenciones por su supuesta relación con ETA. Los agentes han practicado además varios registros en diversos domicilios y se han incautado de 150 kilos de explosivo, 30 de ellos preparados para un atentado inminente, bien mediante un coche bomba o bien mediante una olla.
Durante el registro, las Fuerzas de Seguridad han localizado también un subfusil, un fusil de asalto marca Cetme, una escopeta del calibre 12, tres pistolas automáticas con varios cargadores, además de temporizadores, telemandos, detonadores, numerosa munición y documentación falsa y otra sobre objetivos, según ha informado hoy en rueda de prensa el ministro de Interior, Ángel Acebes. Acebes ha afirmado que con estos arrestos se ha desmantelado el núcleo fundamental del comando Nafarroa de ETA.
La policía sospecha los detenidos podrían estar relacionados con el último atentado mortal de ETA, que tuvo lugar el pasado 30 de mayo la localidad navarra de Sangüesa, donde fueron asesinados dos guardias civiles, y con la colocación de una bomba en un hotel de Pamplona el pasado fin de semana, coincidiendo con los sanfermines. Sin embargo, Acebes se ha mostrado prudente en este extremo y no ha querido confirmar dicha información.
Los detenidos se encontraban huidos y tienen antecedentes por actos de violencia callejera y por presunta vinculación con ETA antes de que pasaran a la clandestinidad y huyeran a Francia. Segurola y Aguinaga habían sido enviados a la zona para formar un nuevo comando Nafarroa. El primero, natural de Urretxu (Guipúzcoa) fue detenido en diciembre de 2001 en una operación contra un grupo de apoyo al comando de ETA que colocó sendos coches bomba en los aeropuertos de Salou y Barajas. El segundo, natural de Berango (Vizcaya), fue detenido en diciembre de 1999 como integrante del más importante grupo de violencia callejera de Vizcaya.
Siete atentados en año y medio
Durante el último año y medio se han producido en Navarra siete atentados que han dejado un saldo de tres agentes policiales muertos y otras doce personas han resultado heridas. El 23 de mayo del pasado año, la explosión de un coche bomba en las proximidades del Edificio Central de la Universidad de Navarra causó heridas a un policía y dos civiles.
El 24 de septiembre, una bomba oculta tras una pancarta de ETA colocada en las cercanías de la localidad de Leiza ocasionó la muerte del cabo de la Guardia Civil Juan Carlos Beiro Montes y dejó heridos a otros tres agentes de este cuerpo. La Guardia Civil sufrió un nuevo atentado el 12 de octubre de 2002 al ser atacado con granadas el cuartel de Urdax. El 29 de septiembre fueron colocadas dos bombas de escasa potencia en sendas empresas de las localidades de Azagra y Arguedas, aunque la existencia de esta última no se descubrió hasta el 11 de abril pasado.
El 30 de mayo de este año, una bomba lapa colocada bajo el vehículo utilizado por un equipo de expedición del DNI de la Policía Nacional causó la muerte de los agentes Bonifacio Martín y Julián Embid y dejó gravemente herido a otro agente. Además, otros cinco vecinos de la localidad de Sangüesa, donde tuvo lugar el atentado, resultaron heridos.
La última acción terrorista se produjo el pasado sábado, día 12, cuando ETA colocó una bomba en los servicios del Hotel Maysonnave, de Pamplona. El artefacto no estalló, pese a que una empleada de la limpieza lo trasladó hasta el sótano ignorando que se trataba de una bomba. Posteriormente, la policía pudo desactivar el explosivo.
