La oposición y los oficialistas ucranios acuerdan aprobar mañana una reforma constitucional
Los mediadores internacionales vuelven a Kiev para impulsar una salida pacífica a la crisis
Diputados de la oposición ucraniana y de los grupos oficialistas han llegado hoy a un acuerdo para aprobar mañana martes, en una sesión extraordinaria de la Rada o Parlamento, una serie de reformas que permitirán superar la crisis postelectoral que desde hace dos semanas mantiene en vilo al país. El acuerdo se ha anunciado mientras en Kiev se encuentra reunida por tercera vez una "mesa redonda" con mediadores internacionales en un intento de dar el impulso decisivo al arreglo de la crisis.
La junta de portavoces ha acordado que en la sesión, que comenzará al mediodía local (11.00 en la España peninsular), serán aprobados "en el mismo paquete" una reforma política y enmiendas a la ley electoral, y que el actual presidente, Leonid Kuchma, cumplirá las principales demandas de la oposición de destituir al Gobierno y a la Comisión Electoral Central (CEC). Según los acuerdos anunciados por el presidente de la Rada, Vladímir Litvín, Kuchma firmará la destitución del Ejecutivo y de la CEC y propondrá a los nuevos miembros de esa Comisión, tras lo cual en una sola votación los diputados aprobarán el proyecto 4180 de enmiendas constitucionales que da a la Rada la prerrogativa de formar Gobierno.
También está previsto aprobar y enviar al examen del Tribunal Constitucional las enmiendas a la Carta Magna referentes a la ley de autogobierno en las regiones. Además, se votará un proyecto de ley sobre la aplicación de la ley electoral en la repetición, el próximo día 26, de la segunda vuelta de los comicios presidenciales del 21 de octubre, invalidada por el Tribunal Supremo debido a fraude masivo. Según el acuerdo anunciado, el presidente Kuchma deberá promulgar estas leyes inmediatamente, en la misma sala de la Rada. Tras la promulgación de esas leyes, la oposición se compromete a desbloquear las sedes del Gobierno y de la Administración de la Presidencia, que por ahora mantiene cercadas en un acto de presión sobre Kuchma.
Timoshenko no votará mañana
La junta de portavoces también ha acordado que la enmienda constitucional que deja en manos de la Rada la formación del Gobierno entre en vigor a partir del 1 de septiembre de 2005, siempre y cuando para entonces sean aprobadas enmiendas constitucionales que regulan las administraciones regionales. En caso de que estas modificaciones no se aprueben, la ley sobre la formación del Gobierno comenzará a aplicarse a partir del 1 de enero de 2006, tal y como pretende la oposición. Sin embargo, el compromiso alcanzado no es del agrado de todas las fuerzas de la oposición: Alexandr Turchinov, del bloque radical de Yulia Timoshenko, la número dos de la oposición, ha avanzado que su grupo parlamentario no votará en la sesión de mañana.
El acuerdo se ha anunciado mientras en Kiev se encuentra reunida por tercera vez una "mesa redonda" con mediadores internacionales en un intento de dar el impulso decisivo al arreglo de la crisis. Esta tercera reunión de los mediadores con los dos candidatos a la Presidencia fue convocada por Kuchma, quien acusa a la oposición de incumplir sus compromisos. Los presidentes polaco, Aleksander Kwasniewski, y lituano, Valdas Adamkus, han sido los primeros en llegar a Kiev y entrevistarse con Kuchma antes de la "mesa redonda" que esta noche ha vuelto a reunir a los dos contrincantes, el dirigente opositor, Víctor Yúschenko, y el primer ministro, Víctor Yanukóvich.
También ha llegado a Kiev el Alto Representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Javier Solana, quien se ha declarado optimista. A su llegada al aeropuerto de Borispil, ha subrayado que ve "altas probabilidades" de desatascar la crisis política ucraniana. Solana ha recordado que la decisión del Supremo de Ucrania de invalidar la segunda vuelta de las presidenciales y de repetir la votación ofrece la mejor salida de la actual crisis, y las consultas con mediación internacional contribuirán a limar las asperezas. Además de Solana, Kwasniewski y Adamkus, en la tercera "mesa redonda" con Kuchma, Yúschenko y Yanukóvich participan como mediadores el presidente de la Rada, el secretario general de la OSCE, Jan Kubis, y el presidente de la Duma rusa, Borís Grizlov.
