Un muerto y 40 heridos en nuevos choques en Kirguizistán
Partidarios del Gobierno interino se enfrentan a seguidores del presidente depuesto Bakíev
Los violentos enfrentamientos entre partidarios del Gobierno interino de Kirguizistán y del presidente derrocado el pasado 7 de abril, Kurmanbek Bakíev, causaron un muerto y cerca de 40 heridos, algunos con heridas de bala.
Unos 4.000 seguidores gubernamentales recuperaron esta tarde el control de la sede regional en la ciudad de Jalalabad (sur), que había sido ocupada por 200 partidarios del ex presidente, según el servicio de prensa del Ejecutivo. Los dos bandos se enfrentaron con palos y piedras, con disparos ocasionales.
Antes, los opuestos a Bakíev entraron en las oficinas administrativas de la cercana ciudad de Osh, que habían tomado ayer los seguidores del mandatario depuesto. Estos exigían la restitución del gobernador regional Mamsadyk Bakirov, destituido por el nuevo Gobierno.
El mandatario derrocado acabó huyendo del país con su familia el pasado 15 de abril, y dimitió formalmente un día después. Entonces, los disturbios causaron al menos 85 muertos. Las tensiones han continuado desde entonces en el país centroasiático, pese a los intentos del Gobierno interino de reafirmar su autoridad.
La crisis provocada por la salida de Bakíev amenazó con afectar gravemente a EE UU y Rusia. Ambos países controlan sendas bases militares en Kirguizistán. Para Washington, las instalaciones de Manas son claves para la guerra en Afganistán.
