"Para dirigir, debes estar antes en muchos equipos"
Cuando Pablo del Campo llegó a Microsoft, de lo primero que se dio cuenta es de que era el único que llevaba traje y corbata. "Bueno, eso me parece buena señal", decía sonriendo. Es ingeniero en telecomunicaciones. Bueno, casi. Sólo le falta entregar el proyecto. "Lo estoy haciendo sobre tecnologías 2.0 en la empresa. Ya sabes: redes sociales, blogs corporativos...", comentaba. Pisar Microsoft, antes de terminar la carrera: todo un sueño. No sólo por las cuestiones tecnológicas, ya que Pablo, aunque ingeniero, aspira a trabajar en gestión. "Lo que me atrae de aquí es trabajar en una empresa de la que el 90% de la gente usa sus productos. Impresionante", razonaba.
María Garaña, la presidenta de Microsoft, le adelantó a primera hora que por la tarde tenían una reunión importante. "Es algo que hago cada trimestre. Me reúno con los mandos intermedios que a su vez tienen a gente por debajo. Me informan de todo. Es esencial comunicarte con toda la empresa, porque así tienes siempre el pulso de la compañía", le explicó.
Mientras caminaban hacia una sala como sacada de una película de ciencia-ficción, con seis enormes pantallas para demostraciones de nuevos productos, Garaña comentó que en el edificio había poca gente. "Es porque muchos trabajan desde casa. Pero yo no puedo. Ni el cargo me lo permite ni por mi forma de ser me gustaría", aclaró. Pablo le preguntó sobre la formación que debería seguir para pasar de una ingeniería a la gestión, y en el futuro incluso a la dirección de equipos. "Yo estudié Derecho y Económicas. Luego un máster en Estados Unidos. Trabajé en consultoría, en tecnología... Al final, lo esencial es que sepas trabajar con personas. Eso es lo que hace un directivo. Y para eso lo mejor es que aprendas de cada mánager que tengas. Para dirigir primero hay que formar parte de muchos equipos", resumió. "Y ante todo recuerda: no hay límites. Los que encuentres es porque te los pones tú".
