La arcilla azul

Una pista de entrenamiento junto a la Caja Mágica llama la atención sobre las demás. Su tierra batida no es del tradicional color rojo, como el resto, sino de un potente azul. "¡Anda! ¡Pero si eso también es tierra!", exclaman muchos espectadores, sorprendidos al ver el tinte de la arcilla. Esa pista, que ya estaba en la edición del año pasado, es una de las apuestas del torneo de Madrid, que en 2009 ya intentó que los partidos se jugaran sobre esa tierra batida azul. La novedad causó gran polémica entre los tenistas, pero el objetivo de los organizadores es que en los próximos años el azul se imponga en el torneo, que sería el único del circuito con este tipo de pista.

La pista azul ya cuenta con la aprobación de la WTA, femenina. La ATP aún no ha dado su visto bueno, aunque en principio no le parece mala idea. Sin embargo, tenistas importantes, como Nadal o Federer, han mostrado en varias ocasiones su oposición al cambio de color. Otros, por el contrario, aseguran que no les importaría jugar sobre el azul. "Hay que acostumbrarse a ver la bola azul y la pista, pero las sensaciones del bote son las mismas. Y este torneo siempre ha sido rompedor, así que estoy a favor", aseguró hace unos días Fernando Verdasco. Tampoco Guillermo García-López pone demasiadas pegas al azul. "No tengo nada en contra, pero creo que debería probarse antes en algún torneo más pequeño", matizó el tenista albaceteño.

El objetivo de esta pista de entrenamiento es, precisamente, que los jugadores se acostumbren al nuevo color y aparquen sus dudas sobre él. El director del torneo, Manolo Santana, está convencido de que el azul acabará triunfando. "Tarde o temprano esta pista terminará imponiéndose", aseguró hace unos días, a la vez que recordaba que el torneo siempre ha apostado por la innovación. Hace dos años, por ejemplo, hubo otra polémica porque una parte de los recogepelotas del torneo eran modelos profesionales, algo que sigue sucediendo.

Tiriac, dueño del torneo de Madrid y máximo defensor de la pista azul, argumenta que, en las retransmisiones de los partidos por televisión, el amarillo de la pelota se diferenciaría mucho mejor con el nuevo color que con el tradicional rojizo. El azul, sin embargo, es el color del patrocinador más importante del torneo, por lo que hay quien tiene dudas sobre el verdadero motor del cambio. "No tengo que hablar con ningún jugador aparte. Sí lo haré con la ATP, pero realmente no hay limitación de colores. Los campeones se van, el deporte se queda", asegura Tiriac en relación con las reticencias de algunos jugadores importantes. Saber quién ganará este partido es cuestión de tiempo.