La crisis del automóvil arrastra el Ibex por debajo de los 9.000 puntos

El pesimismo provocado por el rechazo del plan de ayuda al sector automovilístico de Estados Unidos ha imperado en la Bolsa española, que ha perdido, en línea con los descensos del resto de los mercados europeos, un 2,26%, aunque ha rozado el 5% a media mañana. El tirón a la baja de los pesos pesados del selectivo le llevaba a caer por debajo de los 9.000 puntos y cierra la sesión en 8.975,50.

Los valores que más han caído han sido el sector de la construcción, uno de los más castigados durante la crisis y, por tanto, más volátil, liderado por Sacyr Vallehermoso (-7,27%), FCC (-6,59%) y Ferrovial (-6,03%). El sector financiero también ha sido uno de los más perjudicados durante la jornada. En concreto, Santander se ha dejado un 4,25%, seguido de BBVA (-3,48%), Banesto (-2,43%), Banco Popular (-2,31%) y Banco Sabadell (-2,26%). Bankinter, por el contrario, ha repuntado un 0,64%.

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Por su parte, las plazas del resto del Viejo Continente también sufrían importantes retrocesos. Concretamente, el CAC parisino se dejaba el 2,80%, el S&P MIB de Milán, el 2,56%, el DAX de Fráncfort, el 2,18%, y el FTSE de Londres, el 2,8%.

Además, Wall Street también abría a la baja y registraba a las 15.30 una caída del 2,24%. A lo largo de la jornada ha fluctuado entre los números rojos y verdes, pero ha logrado cerrar en positivo con el índice Dow Jones de Industriales subiendo un 0,75%, ante la noticia de que finalmente las empresas del sector automovilístico estadounidense recibirán ayudas del Departamento del Tesoro.

Ese índice, que agrupa a algunas de las mayores empresas estadonidenses, avanzó 64,59 puntos y concluyó en 8.629,68 unidades, después de perder más del 2% al inicio de la jornada.

Antes de la apertura en Europa, el principal índice del mercado japonés, el Nikkei, se ha dejado durante la jornada de hoy un 5,6%, después de alcanzar números rojos de hasta un 7,3% por los acusados descensos de algunas empresas cruciales, como la automovilística Toyota, y la caída del dólar a tasas de cambio con el yen de hace 13 años provocaron un efecto cadena. Ayer, Wall Street acabó cediendo un 2,24%.